Luis Segura se despidió hoy tácitamente de la presidencia de la AFA, al haber cedido el control de la Asamblea al titular de Gimnasia de La Plata, Daniel Onofri, y anunció que le jueves volverá a reunirse con la jueza que lo procesó y lo embargó por 50 millones de pesos.
Segura aseguró que no se arrepiente sino que fue "un honor" haber sido al presidente de la AFA, aunque dijo que en la última gestión tuvo que comerse "unos cuantos caramelos duros y ácidos".
En otro orden, consideró el cuarto intermedio de la Asamblea permite "ganar tiempo" para lograr la superliga.
Los problemas con la Justicia
Luis Segura, concurrió hoy a los tribunales federales de Comodoro Py 2002 para notificarse personalmente del procesamiento por "defraudación" que le impuso la jueza federal María Servini de Cubría y dar cuenta al tribunal que no tiene bienes para cubrir el embargo de 50 millones de pesos que se le impuso.
El ahora ex presidente afista está procesado en el marco de la causa en la que se investigan presuntas irregularidades en el manejo de los fondos aportados a la AFA por el Estado Nacional a través del programa Fútbol para Todos.
La jueza dispuso en la parte resolutiva "decretar el procesamiento sin prisión preventiva" por considerarlo prima facie autor del delito de administración fraudulenta agravada por haberse cometido en perjuicio de una administración pública". Segura notificó además al tribunal que no posee bienes suficientes para afrontar el embargo en su contra.
