Argentina es principalmente un país de tránsito para la droga que entra por las provincias del norte y termina en Estados Unidos y Europa, aunque el descubrimiento de laboratorios clandestinos indica que en el país también se lleva a cabo la refinación, indicó hoy la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) en su informe mundial.
“Durante el período comprendido entre 2005 y 2014, la Argentina y el Brasil fueron los países mencionados con más frecuencia como centros de tránsito en las rutas hacia América del Norte y Europa occidental y central”, subrayó el trabajo en su apartado sobre la situación de Sudamérica.
“En lo que se refiere a las incautaciones de cocaína, los principales países de origen de los envíos a Europa en 2014 fueron, por orden descendente de los volúmenes incautados, Costa Rica, Ecuador, Colombia, Brasil, Venezuela y Argentina”, añadió el organismo de Naciones Unidas.
De acuerdo al análisis, “las drogas entran en forma clandestina por las provincias del norte que son vulnerables debido a sus zonas aisladas y a su proximidad geográfica con Bolivia y, en menor medida, Perú”.
Especificó que los estupefacientes ilícitos “se transportan principalmente por tierra, utilizando carreteras que atraviesan la frontera, pero también, aunque con menor frecuencia, por vía aérea”.
La JIFE destacó que Argentina “está procurando contrarrestar esas amenazas mediante el Operativo Escudo Norte”, creado en 2011 para vigilar las fronteras y luchar contra el tráfico de drogas, la trata de personas y el contrabando pero el volumen de cocaína incautado en 2014 fue de 10,4 toneladas, una cifra que se mantiene estable desde 2012.
A nivel regional, la investigación concluyó que “América del Sur sigue siendo el principal lugar de origen de toda la cocaína fabricada en el mundo” con el cultivo y elaboración de cocaína que tienen lugar “sobre todo en Bolivia, Colombia y Perú”.
“Sin embargo, la incautación de hoja y pasta de coca, así como el descubrimiento de laboratorios clandestinos en países vecinos, como la Argentina y Chile, parecen indicar que la refinación también se lleva a cabo en otros lugares de la región”, alertó la JIFE.
Y en ese marco subrayó que “Argentina notificó el descubrimiento en 2014 de 15 laboratorios clandestinos de refinación, fabricación de comprimidos, corte y empaquetado, 12 de los cuales se dedicaban a la cocaína”.