El público y los científicos en Estados Unidos están a años luz de distancia en temas de ciencia, y 98% de los investigadores encuestados considera un problema el hecho de que la población no sabe de qué hablan ellos.
Los científicos están mucho menos preocupados por los alimentos genéticamente modificados, el uso de pesticidas y la energía nuclear que el público en general, según encuestas realizadas a la población y en la mayor organización científica del país.
Los investigadores tienen más certidumbre de que el calentamiento global es causado por el hombre; que la evolución es un hecho; que la sobrepoblación es un peligro y que es necesaria la vacunación obligatoria a los niños contra enfermedades.
En ocho de 13 temas orientados a la ciencia había una diferencia de 20 puntos porcentuales o más entre las opiniones de la gente y las de los científicos de la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia (AAAS, por sus siglas en inglés), de acuerdo con el sondeo efectuado por el Centro Pew de Investigaciones.
Las diferencias no se relacionan con ninguna otra división en lo liberal o conservador, ya que los científicos algunas veces tienen puntos de vista más conservadores y otras más liberales.
En la división más marcada, 88% de los científicos encuestados dijeron que es seguro comer alimentos genéticamente modificados, mientras que sólo 37% del público opina que son seguros y 57% que son inseguros. Además, 68% de los científicos consideran que es seguro comer alimentos cultivados con pesticidas, comparado con sólo 28% de la gente común.