Un joven fue secuestrado en el barrio porteño de Mataderos por delincuentes que le exigieron a su familia 80.000 pesos de rescate, aunque antes de que el pago se efectuara logró arrojarse del auto en el que lo llevaban sus captores, que se tirotearon con la Policía.
Fuentes policiales informaron hoy que en el episodio, que ocurrió la noche del martes, la víctima resultó ilesa y la banda escapó a pesar de haber sido perseguida hasta un asentamiento del partido bonaerense de Tres de Febrero, donde abandonaron el vehículo y se ocultaron.
El fiscal federal Federico Delgado, que interviene en la causa, confirmó que "hubo tiros, persecuciones y una víctima que se tiró del auto", al denunciar ante la Procuradora General de la Nación, Alejandra Gils Carbó, la "inoperancia" de la empresa de telefonía celular Movistar por no acatar un pedido de intervención inmediata de una línea telefónica para localizar a la víctima.
El hecho comenzó cuando Adrián Diego Balzano, de unos 30 años, circulaba en su auto Volkswagen y fue interceptado en Mataderos por unos cuatro delincuentes armados que lo forzaron a subir al vehículo de la banda, un Ford Focus.
Una vez reducido el joven, los captores se comunicaron por teléfono con su cuñado, Gabriel Caterina, a quien le exigieron la entrega de 80.000 pesos por su liberación.
Caterina llamó a la comisaría de Villa Lugano para relatar lo que sucedía y llegaron a su casa efectivos de la comisaría 48va. y personal de la División Operativa Central de la Policía Federal Argentina (PFA), la ex División Antisecuestros.
El cuñado pactó con los captores el pago del rescate y recibió instrucciones de dirigirse al barrio de Liniers para efectuar la entrega del dinero.
Sin embargo, en el lugar indicado, las autoridades decidieron intervenir, por lo que los delincuentes escaparon hacia la avenida General Paz y cruzaron al partido bonaerense de Tres de Febrero.
Policías en un patrullero iniciaron una persecución durante la cual hubo un tiroteo en el que los secuestradores balearon el móvil.
En un punto del trayecto, el joven cautivo aprovechó la distracción de sus captores, consiguió abrir una de las puertas del Focus y se arrojó a la calle. Luego, llamó a su cuñado para avisarle que había logrado escapar y pedirle que lo fueran a buscar.
Los secuestradores, en tanto, fueron interceptados por policías bonaerenses de la comisaría de Tres de Febrero que habían sido advertidos por sus colegas de la PFA, por lo que comenzó una nueva persecución y tiroteo.
Los delincuentes llegaron hasta el barrio Ejército de los Andes, denominado "Fuerte Apache", en la localidad de Ciudadela Norte, abandonaron el Focus y escaparon a pie antes de que los policías pudieran atraparlos.
Personal de la PFA buscaba hoy intensamente a los secuestradores, al tiempo que constató que el auto que utilizaban -el cual fue sometido a peritaje de rastros- había sido robado el lunes último en jurisdicción de Ramos Mejía, en el partido de La Matanza.