Una mujer denunció que su mejor amiga la violó al quedarse dormida junto a su hijo. El calvario se extendió durante los últimos cuatro meses.
"Me desperté de golpe y la vi a ella arrodillada al lado de la cama abusando de mí", contó Ruth Pérez en C5N. Hace pocos días, la mujer pudo recuperarse de tan dramático episodio y decidió formalizar la denuncia, además de contar lo ocurrido ante la prensa.
Ruth vive en la localidad platense de Villa Elvira. Durante un asado familiar el pasado 24 de febrero, la mujer en la que confiaba, su compañera de trabajo y amiga de toda la vida compartió el almuerzo y unos tragos. El cansancio obligó a que Ruth tomara una siesta en una habitación. La sorpresa vino al despertar: abrió los ojos y se quedó helada al notar que su amiga abusaba de ella.
La mujer recuperó el sentido, dio un salto y empujó de un golpe a su amiga buscando proteger a su hijo, que estaba durmiendo junto a ella. "Vamos a ir ya para tu casa, de esto se van a enterar tu mamá y toda tu familia. Esto lo denuncio, no va a quedar acá. O te interna tu mamá en un psiquiátrico o te interno yo", le dijo Ruth a su amiga.
"Hizo a mi hijo partícipe de la situación de abuso. Había tomado alcohol pero estaba consciente. Tenía una cara de perversidad para con el nene, como diciendo 'mirá lo que estoy haciendo a tu mamá'", recordó Ruth en la entrevista televisiva.
El calvario de Ruth siguió: "Fui a hablar con su mamá pero no me creyó y empezó a amenazarme a mí y a mi familia. Si yo contaba algo, ellas me iban a desprestigiar diciendo que yo había tenido una relación con el presidente del Colegio, que le iban a contar a su esposa, que iban a hacer que me echaran del trabajo y un montón de cosas más".
En abril pasado, la situación se tornó mucho más violenta. Discutió con la madre de su amiga y sintió como tres piedrazos. "Miré por la ventana y vi una hilera de fuego en el techo del comedor de mi mamá, que empezó a los gritos y luego llamó al 911", apuntó Ruth contra la familia de su amiga.
Ella intentó visibilizar el abuso en el ámbito laboral, pero la respuesta fue esquiva. "Como había sucedido por fuera del ámbito laboral, nos pidieron que no lo difundiéramos. Quieren echarme para que no se viralice el hecho, me apartan como si tuviera lepra. Necesito hacer justicia", aseveró.
A la espera de reunirse las pruebas y llamar a los testigos, el abogado de Ruth, Darío Saldaño, cuestionó los escasos avances. "Lo grave es la falta de respuesta institucional del trabajo y de distintos sectores de la justicia, que no han dado curso a las situaciones de amenazas", dijo.