Pocos minutos después del primer oro en los Juegos Panamericanos, Argentina se quedó con las ganas de alcanzar el segundo. Los Pumas estuvieron en ventaja casi todo el partido, pero no aguantaron la presión en el cierre y cayeron por 22 a 19 ante el local Canadá en la final para llevarse finalmente la medalla plateada en el seven de rugby.
Argentina, que había superado con holgura a Uruguay en la semifinal, obtuvo rápidamente una ventaja de 12-0. Pero Canadá consiguió descontar con un try sobre el cierre de la primera etapa para darle incertidumbre al marcador. Y en el comienzo del complemento -el partido dura dos tiempos de 10 minutos cada uno- un nuevo try del local significó la igualdad.
Los Pumas no se quedaron anímicamente cuando se esfumó la ventaja y reaccionaron con un nuevo try, de Santiago Alvarez, quien se filtró dentro de la defensa canadiense. Tras la alegría del try, llegó la preocupación por una tarjeta amarilla a Sábato por una acción temeraria. Argentina se quedó así con un jugador menos en un momento clave del partido.
Canadá volvió a recortar distancias a tres minutos del final para quedar 19-17, para llegar a un cierre dramático. Y con un nuevo try en el último minuto consiguieron el 22-19 con el que se cerró el partido.
Para Los Pumas quedó el sabor de la frustración -renovada, porque también se tuvieron que conformar con el segundo puesto en Guadalajara-, sobre todo por haber estado tan cerca de llegar a lo más alto.