Un médico se equivocó de paciente y le realizó un aborto a una joven que tenía que recibir una inyección nutricional en una clínica de Corea del Sur.
El hecho ocurrió a principios de agosto, cuando la mujer, oriunda de Vietnam, había asistido a un hospital ubicado en Gangseo. Los médicos le confirmaron que tenía seis semanas de embarazo y le recomendaron un tratamiento.
Cuando la mujer -acompañada por su esposo- estaba esperando por la inyección, una enfermera llegó a la habitación con el historial del paciente equivocado. En realidad, ese historial correspondía a una mujer que necesitaba cirugía por un aborto involuntario, debido a que el feto había muerto.
Sin confirmar la identidad de la mujer, la enfermera le inyectó la anestesia en lugar del apoyo nutricional.
Cuando se durmió, un ginecólogo realizó la cirugía, y tampoco pudo verificar las historia clínica de la paciente. Después del procedimiento de 30 minutos, la chica se fue a su casa pero notó un sangrado y pidió hablar con el médico. Pero el hospital le dijo que ya se había ido.
La mujer visitó el hospital al día siguiente mientras el sangrado continuaba y recibió otro chequeo de otro médico, quien le dijo que el bebé había sido abortado, informó el portal Korean Times. Automáticamente, la víctima avisó al 911.
Las autoridades investigaron si el hospital podía ser acusado por "aborto sin consentimiento", que puede ser castigado con hasta tres años de prisión. Pero el cargo no era aplicable porque la joven no aprobó ni desaprobó el procedimiento. Ahora se investiga "negligencia profesional".