BEIJING. China expresó un optimismo cauto el sábado sobre el primer paso de un acuerdo para aminorar una guerra comercial por la que culpa a Estados Unidos.
Expertos y medios chinos junto con funcionarios gubernamentales señalaron que el pacto reducirá la incertidumbre para las empresas, al menos en el corto plazo. Pero mantuvieron la cautela apuntando que ambas partes tendrán que mostrar su disposición a comprometerse para resolver sus diferencias más fundamentales.
"Al menos estabiliza la situación y sienta las bases para la próxima ronda de conversaciones comerciales o la cancelación de aranceles adicionales en el futuro", dijo Tu Xinquan, profesor en la Universidad de Negocios Internacionales y Economía en Beijing. "No puedo predecir qué logros se pueden alcanzar durante futuras conversaciones", agregó.
Beijing y Washington anunciaron un acuerdo de "Fase 1" por el que ambas partes rebajarán los aranceles y China comprará más productos agrícolas a Estados Unidos. Las autoridades chinas apuntaron que el documento de nueve capítulos –que aborda la propiedad intelectual, la transferencia de tecnología, los servicios financieros y la resolución de disputas– debe pasar una revisión legal y de traducción antes de la firma.
En una conferencia de prensa a última hora de la noche, programa para coincidir con la mañana de Estados Unidos, funcionarios dijeron que Washington empezaría a retirar gradualmente los aranceles a las importaciones chinas, en lugar de elevarlos. El acuerdo se anunció a apenas dos días de la entrada en vigor de una nueva subida. China hará recortes similares, agregaron sin ofrecer más detalles.
Reformas
China describió el pacto como acorde con la línea de apertura de su economía y con sus reformas económicas. Una mayor importación de productos de alta calidad de Estados Unidos y de otras partes "satisfará las crecientes necesidades de la población para una vida mejor", dijo Wang Shouwen, viceministro de comercio y negociador, en un comunicado.
Bai Ming, un experto en economía considerado próximo al Ministerio de Comercio, dijo al diario estatal Global Times que los recortes arancelarios estadounidenses demuestran una actitud positiva. "No muestran lo suficiente, pero es una mejora", dijo según fue citado por el periódico.
En otro artículo, el Global Times, que tiene una línea editorial nacionalista, calificó el acuerdo como un nuevo comienzo y destacó las ganancias en los mercados bursátiles en los últimos días, coincidiendo con los rumores sobre un posible entendimiento.
La disputa entre las dos mayores economías del mundo sacudió las bolsas y deprimió el crecimiento global.
"China y Estados Unidos han estado inmersos en una guerra comercial durante unos 20 meses y ningún bando podría superar al otro para imponer imprudentemente su voluntad", apuntó el diario.
Pero añadió que ambas naciones pueden prolongar la guerra comercial y que deben estar dispuestas a comprometerse si quieren resolver sus diferencias a través de negociaciones pacientes.
“Roma no se hizo en un día”, escribió. Agencia AP
¿Deberá dar Donald Trump sus datos financieros?
El Tribunal Supremo de Estados Unidos aceptó anoche estudiar tres casos relacionados con los datos financieros del presidente, Donald Trump, y fijó para marzo de 2020 como fecha para escuchar los alegatos de esta causa, mientras que su fallo se espera para junio, en plena campaña electoral a la Casa Blanca.
En un comunicado, el Supremo informó que atenderá la petición de los abogados del mandatario de escuchar esos procesos. En caso de que el tribunal no hubiese aceptado analizarlos, Trump se hubiese visto forzado a entregar los documentos.
Lo que se va a dirimir ahora en el Alto Tribunal es si la Cámara de Representantes de EE.UU. y un fiscal de Nueva York pueden emitir citaciones judiciales para que bancos y la empresa de contabilidad de Trump entreguen los registros financieros del mandatario. Así lo habían ordenado tres tribunales inferiores contra los que los abogados de Trump presentaron recursos hasta llegar al Supremo.
Estos casos son los primeros relacionados con las finanzas del mandatario de Estados Unidos que llegan al Supremo, y podrían resultar en una decisión sobre hasta qué punto llega su principio de inmunidad frente a las investigaciones penales.
Trump confía en que la mayoría conservadora en la máxima instancia judicial le evite tener que hacer públicos sus datos fiscales.