La producción de crudo continúa cayendo en Mendoza, pero a menor ritmo que en los primeros meses del año. Para los expertos, la desaceleración de la retracción tiene que ver con el aumento de las inversiones y la normalización del mercado de hidrocarburos.
Según estadísticas publicadas por el Ministerio de Energía de la Nación, entre enero y setiembre de este año las petroleras produjeron 3.256.692 m3 de crudo, mientras que en igual período de 2016 habían elaborado 3.431.883 m3, lo que deja un resultado negativo de 175.191 m3 (-5%).
Sin embargo, no todas son malas noticias para el sector. Si se analiza lo ocurrido mes a mes, se observa una desaceleración de la caída en los niveles de producción.
En el primer trimestre del año, por ejemplo, el balance fue del 6% negativo. Las petroleras produjeron en Mendoza 1.144.260 m3 de crudo entre enero y marzo del 2016 y alcanzaron un volumen de 1.071.927 m3 en los primeros tres meses de este año.
Parte de esa caída tuvo que ver con los paros de actividades realizados por los trabajadores petroleros de Neuquén. Según estimaciones del Gobierno provincial, esa situación provocó la pérdida de 20.000 m3 para Mendoza.
De todas formas, en el segundo trimestre el resultado fue similar (-7%). Se produjeron 1.136.884 m3 de crudo entre abril y junio del año pasado y 1.056.774 m3 en el mismo período de 2017.
La situación cambió en el tercer trimestre. Si bien el resultado volvió a ser negativo, la caída fue sólo del 2%. En el período julio-setiembre de 2016 se produjeron en la provincia 1.150.739 m3 de crudo y en igual período de 2017 se elaboraron 1.127.990 m3.
Además, setiembre fue el mes con menor caída en el año.
Esos números están claramente relacionados con lo hecho por YPF, empresa que tiene una participación de más del 60% del volumen total producido.
La empresa estatal cayó siempre durante los primeros siete meses del año, pero en agosto logró un crecimiento interanual del 1% y en setiembre se mantuvo prácticamente estable, con una leve variación del 0,02% positiva.
Suba de inversiones
Hay varios factores que explican el comportamiento del sector de hidrocarburos. Uno de ellos es el nivel de inversiones. Al ser un sector que trabaja con recursos naturales no renovables, depende mucho más de las inversiones que otros sectores.
Por eso es importante considerar cuántos recursos están destinando las empresas petroleras a las tareas de exploración y explotación.
De acuerdo a la información estadística publicada por el Ministerio de Energía de la Nación, en 2017 se anunciaron inversiones por U$S 589,9 millones, un número que está por debajo de lo registrado en 2016 (U$S 760,4 millones), pero muy por encima de algunos años que fueron críticos.
Es el caso por ejemplo de 2009, cuando las empresas petroleras desembolsaron sólo U$S 166,3 millones en Mendoza para tareas de exploración y explotación.
De hecho, entre 2008 y 2012 inclusive, se invirtieron un total de U$S 1.482,4 millones en el sector, mientras que entre 2013 y 2017 se destinaron U$S 3.110,2 millones, casi un 110% más.
"El aumento de recursos destinados a exploración y extracción de los años posteriores empiezan a tener un efecto positivo"
Pablo Salvador, economista de Fundación Ideal, explicó que el efecto de las inversiones se evidencia con los resultados de los años posteriores. "La caída en el nivel de producción se explica en parte por la baja inversión registrada hasta 2012, pero el aumento de recursos destinados a exploración y extracción de los años posteriores ya empieza a tener un efecto positivo", comentó.
Coincidió con esa lectura Sebastián Laza, economista asesor del Ministerio de Economía, Infraestructura y Energía de Mendoza. "Hace tres años que se revirtió la curva de inversión y recién ahora comienzan a verse los resultados. Es normal en los tiempos de este sector", afirmó.
Santiago Fernández Herrero, director de Hidrocarburos de Mendoza, también se refirió al aumento de las inversiones. "En 2014 hubo un freno importante de las inversiones, pero a partir de 2015 comenzaron a crecer y en el segundo semestre de 2017 hemos alcanzado montos interesantes", apuntó.
"Ese repunte es el que ahora permite una recuperación de los niveles de producción. Aunque los resultados siguen siendo negativos, hay un cambio de tendencia notable y hay razones para pensar que Mendoza seguirá aumentando sus niveles de producción en los próximos años", señaló.
En este caso en particular, el Director de Hidrocarburos aclaró que la desaceleración de la caída se debe a los buenos resultados conseguidos en Chachahuén, donde se están produciendo 1.500 m3 diarios de crudos. "Esa área ya representa el 12% de la producción total", aseguró.
Cambio de escenario
Más allá de la relación directa entre inversiones y producción, hay otros factores que también influyen en los resultados del sector hidrocarburífero.
Según la lectura de José Vargas, jugó un papel importante la liberación del precio de los combustibles.
"El gobierno ya había adelantado que iba a liberar el precio de los combustibles a principios de año. Eso motivó a las petroleras a aumentar su nivel de producción y preparar el terreno para cuando la liberación se hiciera efectiva", señaló el economista.
El director de Hidrocarburos coincidió en que hay un efecto positivo de la liberación de precios sobre los niveles de producción, debido a la recuperación del precio internacional del barril de crudo, que arrancó el año cotizando a U$S 52,33 el barril y este mes ya tocó varias veces los U$S 57.
Para Sebastián Laza, "la liberación de precios tendrá un impacto mucho más notorio recién dentro unos cuatro o cinco años", pero reconoció otros factores que favorecieron el aumento de la producción de crudo durante 2017.
"Influyeron mucho los aumentos de precios registrados en las bocas de expendio en los últimos años. Al mejorar sus ingresos, las petroleras tuvieron un incentivo a la producción", indicó.
Continuando con su análisis, José Vargas agregó que el marco legal y económico en general es mucho más claro que hace algunos años, lo que genera mayor atracción de inversión en empresas nacionales y extranjeras.
Expectativas de crecimiento
Las expectativas a futuro son favorables para el sector petrolero de Mendoza. Más allá de las estadísticas que muestran una desaceleración de la caída y un escenario económico que parece algo más atractivo, se espera un repunte de la producción en los próximos años de la mano de las nuevas concesiones de áreas petroleras.
Cabe recordar que el Gobierno de Mendoza llamó a licitación para doce áreas. Dos de ellas están ya habilitadas para tareas de explotación (Puesto Pozo Cercado Oriental y una superficie de 40,5 km2 de Atuel Norte) y diez para exploración (Puesto Pozo Cercado Occidental, Los Parlamentos, CN III Norte, Boleadero, Loma Cortaderal, Ranquil Norte, CN VII A, Loma El Divisadero, Chachahuén Oeste y otra zona más grande de Atuel Norte). Entre todas conforman una superficie de 6.531,35 km2.
Aunque resulta imposible saber cuánto puede aumentar la producción con esa iniciativa, se estima que puede haber un impacto considerable dentro de cinco o siete años. Además, se prevén buenos montos de inversión en esas zonas.
El ministro de Economía, Infraestructura y Energía, Martín Kerchner, aseguró que "se esperan inversiones de U$S 1.000 millones en los próximos tres años" y advirtió que "ese monto podría hasta duplicarse, si las propuestas de las empresas son atractivas".
El director de Hidrocarburos, Santiago Fernández Herrero, aclaró que el monto podría llegar a los U$S 2.000 millones de inversión en los próximos tres años, pero contemplando al total de la actividad del sector en la provincia, no sólo lo referido a las 12 nuevas concesiones.
En vistas a futuro, hay buenas expectativas también en la parte de la cuenca Neuquina que está en territorio mendocino. "Son 10.000 km2 de crudo pesado con un gran potencial de producción. Cuando se estudie el nivel de porosidad y se determine el mejor método de producción, habrá un crecimiento enorme para la provincia", aseguró Fernández Herrero.