Anualmente llegan a Mendoza unos 3,5 millones de turistas. En 2018 fueron 3,7 millones. De ellos, el 40% se aloja en casas de familias y amigos, es decir que el año pasado fueron cerca de 1.480.000. Así lo informó Gabriela Testa, presidenta del Ente Mendoza Turismo, en referencia a datos de consumo turístico por hogares del Indec. Agregó que la provincia en esto aparece por debajo de la media nacional, que es de 50%.
Con ese criterio, en el fin de semana que pasó y fue extra largo, varios hogares mendocinos hicieron lugar a los 24 mil de los 60 mil visitantes que arribaron. Por otra parte, Testa destacó que estos datos no incluyen a quienes alquilan de manera informal, sobre lo cual está poniendo el foco su cartera. "Estamos siempre detrás de los alojamientos informales, tratando de que se formalicen. En Mendoza hay una ley que permite inscribirse como alojamiento temporario", detalló. El registro en cuestión fue creado en 2007.
"Hubo una época de mucha oferta informal, después de 2001, pero no alcanzaba la oferta de plazas porque había aumentado mucho el flujo de turistas chilenos. Por eso el mismo gobierno abría listas de casas de familia para ofrecer", recordó. Esta tendencia a alojarse en casas de conocidos e incluso desconocidos se ve favorecida por las plataformas que en internet permiten los contactos. Incluso propuestas como la de Airbnb también aportan esta posibilidad, aunque en ese caso hay que pagar. "En los jóvenes hay una tendencia a hacer contactos e intercambiarse sus propias casas a través de diversas plataformas", destacó.
Más que un paseo
De los turistas que llegan a la provincia, el 70% provienen de otras partes de Argentina, en particular de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y territorios limítrofes.
En tanto, el 30% son extranjeros, mayormente chilenos y brasileños. Pero entre quienes apelan a la modalidad de quedarse en casa de algún conocido también deben incluirse quienes hacen turismo interno. Para algunos, evitar el costo de alojamiento es quizás la única chance para poder viajar.
Esto define también el destino, ya que deben buscarse lugares donde haya gente que pueda brindar un techo. Pero por otra parte, algunos aprovechan ese ahorro para otros gastos y así mejorar la estadía. Beatriz es de San Rafael y prácticamente todos los años trata de visitar el Gran Mendoza. La oportunidad se ofrece de la mano de su prima y su familia que la reciben con su hijo de 5 años y su marido con los brazos abiertos. Dijo que ella siente que la Ciudad es muy grande comparada con el lugar donde vive, donde las cosas se hacen a pie y todos se conocen.
"No conocemos Mendoza, entonces nos da más seguridad andar con ellos, además nos permite compartir tiempo", comentó. Por otra parte, "aprovechamos para usar el dinero del alojamiento para hacer otras cosas como salir a comer", destacó. Sebastián llegó a Mendoza desde Córdoba, con la intención de obtener material para un documental. A través de una conocida se alojó en casa de Jimena.
"Prefiero parar en casa de gente antes que en hoteles o posadas porque te permite conocer más profundamente el lugar, llegás donde no llegarías en un circuito turístico, a veces las agencias no los ofrecen", destacó. Pero hay mucho más que eso en la experiencia: "Cuando llego a un lugar lo que más me interesa son las personas, parar en casas te vincula no sólo con la gente de ella sino además con sus vecinos y amigos", consideró.
Turistas en su tierra
Recibir viajeros en casa es también toda una experiencia. Por un lado implica adaptar espacios y tiempo. Además es una oportunidad para conocer otras formas de vida, intercambiar charlas e incluso conocer personas. Pero esto de hacer de anfitrión tiene un plus: obliga a tomarse tiempo para hacer turismo por el propio lugar y ver eso que está siempre ahí, muy cerca, con otros ojos. Incluso, hay quienes descubren sitios en estas situaciones.
"Hemos recibido una pareja de amigos de Santiago de Chile y nosotros también vamos para su casa. Vienen a fin de año, se quedan cuatro o cinco días, visitan a sus amigos y como a él no le gusta salir yo la llevo a pasear a su esposa", relató Lorena. "A veces es complicado porque uno sigue trabajando y por otra parte hay que adaptar la casa y tener los recursos necesarios. Por ejemplo, hay que ver que en la cochera entren los dos vehículos o tener camas y colchones con sus sábanas y abrigos, pero siempre se disfruta", contó.
Para Jimena, ir de paseo con Sebastián fue un reencuentro con su provincia. "Le mostramos lo básico de Mendoza como el parque o el Cerro de la Gloria, donde hacía muchos años que no iba. Estuvo bueno el intercambio que se generó en la casa, Córdoba es cerca pero tenemos costumbres diferentes, por ejemplo le hicimos comer tortitas", dijo con humor. Reconoció que fue una oportunidad de ver el lugar con otros ojos, si no no lo ves, es parte de tu cotidianidad visual", subrayó.
Hay 90% de reservas para este fin de semana
La Vendimia es claramente el evento que más turistas convoca en Mendoza.
La prueba: hay 90% de reservas hoteleras para este fin de semana vendimial. Desde el Ente Mendoza Turismo señalaron que es imposible calcular cuánta gente terminará viniendo dado que hay una importante proporción de turismo espontáneo.
El fin de semana pasado fue extra largo por los feriados de Carnaval y llegaron a la provincia alrededor de 60 mil turistas. Algunos privilegiados pudieron quedarse toda la semana para disfrutar de los tradicionales festejos locales. Pero se esperaba una alta rotación de visitantes por lo que muchos se fueron entre lunes y martes y entre el jueves y ayer llegaron otros.