Después de recibir el “respaldo claro y contundente” de la Presidenta, como él mismo lo definió, el candidato del Frente para la Victoria (FpV), Daniel Scioli, prometió ayer eximir del pago de Ganancias el medio aguinaldo de diciembre si resulta electo; identificó a la coalición Cambiemos de Mauricio Macri con la Alianza que llevó al poder a Fernando De la Rúa e hizo guiños hacia los dirigentes peronistas Adolfo Rodríguez Saá y Felipe Solá.
El cambio de estrategia que comenzó a anunciar el jueves pasado, tras reunirse en Tucumán con los demás gobernadores justicialistas y aliados, con el anuncio de que si es electo aplicará el 82% móvil para las jubilaciones mínimas, recibió una primera buena acogida de parte del ex candidato de UNA, el peronista Sergio Massa. Los 5,2 millones de votos que sacó UNA el domingo se han convertido en el botín decisivo pretendido por Scioli y por Macri.
“Celebremos que Scioli empiece a escuchar. Me parecen un avance sus declaraciones”, dijo Massa en un comunicado sobre el anuncio del 82% móvil. Al respecto Scioli dijo ayer que esa medida permitirá llevar la jubilación mínima de 4.300 a 4.968 pesos, pero aclaró que implicará dejar sin efecto su anuncio previo a la primera vuelta de eximir del pago del IVA a los jubilados.
También ayer el candidato del FpV se comprometió en declaraciones periodísticas a eximir del pago de Ganancias al próximo medio aguinaldo, lo que representarán unos 8 mil millones de pesos. Una medida similar decidió la Presidenta el año pasado.
Scioli hizo además un guiño hacia los ex candidatos presidencial Rodríguez Saá y a gobernador bonaerense por UNA, Solá (“fue elogiado en la reunión de gobernadores”) por sus declaraciones en las que deslizaron la posibilidad de votarlo en el balotaje, al tiempo que insistió en criticar a Macri y a Cambiemos por ser “la versión 2015” de la Alianza que gobernó hasta el estallido de fines de 2001.
“Esto ya lo vimos cuando asumió De la Rúa”, dijo, y agregó: “La alianza (Cambiemos) tiene una visión de la economía en función del mercado, de buscar la competitividad vía el ajuste y la devaluación, y eso es bajar los salarios en términos reales. Son recetas que pertenecen al pasado. Ahora tengamos cuidado, no nos autocastiguemos”.
Scioli arrancó así un cambio de estrategia, después de que sin su presencia y sin siquiera mencionarlo por su nombre, la presidenta Cristina Fernández llamó a votarlo como el candidato del “proyecto de inclusión” que reclamó plebiscitar, en el discurso de anteanoche en la Rosada con el que reapareció tras la elección del domingo.
Al respecto pidió dejar de especular en torno al apoyo presidencial a su candidatura y consideró “claro y contundente el respaldo” que recibió. Mientras, el jefe de Gabinete y derrotado candidato a gobernador bonaerense, Aníbal Fernández, minimizó el asunto: “Los votos no le pertenecen a nadie, y la Presidenta hizo hincapié en ese tema”.
Por su parte la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, advirtió que si Macri resulta electo, represores de la dictadura que fueron condenados serán liberados.
El diputado nacional electo por el Pro y ex secretario de Inclusión y Derechos Humanos de la Ciudad, Daniel Lipovetzky, aseguró que “es un delirio” pensar que “Mauricio Macri liberará a represores” y recomendó a Carlotto “quedarse muy tranquila” porque “el gobierno que viene es el del respeto a la ley y las instituciones de la República”.
