El alemán Michael Schumacher, que estuvo más de cinco meses en coma inducido por el accidente sufrido el 29 de diciembre de 2013 mientras esquiaba en los Alpes franceses, dejó ayer el hospital universitario de Lausana y continuará la rehabilitación en su casa a los 45 años de edad.
“Aún queda un camino largo y difícil por delante”, explicó la familia del siete veces campeón del mundo de Fórmula 1.