Al fundar nuestra ciudad, Don Pedro del Castillo estableció a San Pedro como patrón y abogado de los futuros mendocinos.
Sin embargo, pocos años más tarde mutó por Santiago Apóstol. Hacia 1575 ya se realizaban procesiones en su honor en vísperas al 25 de julio.
En 1911 nuestra tradición se presentó al resto del país a través de las páginas de "Caras y Caretas". La revista porteña publicó las imágenes que acompañan esta nota junto un párrafo singular:
"El 25 del mes próximo pasado, día del Apóstol Santiago, se celebró en Mendoza, y principalmente en el templo de San Nicolás, la fiesta patronal de la ciudad. Hubo por la mañana en dicho templo un oficio religioso, y por la tarde una procesión recorrió las calles adyacentes a él. En una de nuestras fotografías aparece la imagen del Apóstol, armado de todas sus armas, pues era santo muy belicoso, y por consiguiente el mejor patrono imaginable para cuna del Ejército do los Andes".