Detrás del repunte del dólar en la rueda del lunes, además de una suba generalizada de la divisa en la región, hay una norma con la que el Banco Central (BCRA) busca blindarse de potenciales colocaciones de capitales golondrina que puedan llegar a disparar una corrida cambiaria precisamente en un año de elecciones.
La norma conocida la semana pasada limita las tenencias de Leliq los bancos al 65% de sus depósitos o el 100% de su patrimonio, algo aparentemente excesivo para un stock de esas letras que llega apenas al 30% del stock de depósitos.
Sin embargo, bancos de segundo piso estaban entrando divisas para apostar por la tasa en pesos, posiciones que la entidad conducida por Guido Sandleris prefiere no incentivar luego de la salida masiva de esos fondos durante la corrida cambiaria de 2018..
Según operadores y analistas, la medida tiene un efecto marginal en el sistema, pero ello no quita que se haya hecho sentir en el mercado cambiario.
"Es para algunas entidades de segundo piso que estaban tomando fondos afuera en alguna filial y que hacian total return swaps, dando acceso a inversores del exterior a las Leliq", dijo Miguel Zielonka de Econviews.
"A nivel sistema no te mueve la aguja", agregó. Los datos globales del sistema, es decir todos los bancos juntos, muestran que el tope impuesto por el BCRA la semana pasada le queda bien holgado al sistema financiero.
Según datos oficiales analizados por Consultora Ledesma, el stock de Leliq alcanza el equivalente al 30,6% de los depósitos que manejan todas las entidades financieras.
Si se toman depósitos del sector privado, el stock de Leliq equivale al 40,3%.
Todas cifras que están muy por debajo del 65% de límite a las tenencias que impuso la autoridad monetaria.
Contados con los dedos
"Depende de qué banco hablemos, el sistema no está pasado", dijeron en la mesa de un banco.
"Sin embargo, los bancos chicos extranjeros que no tienen balance pueden estar pasados de la norma, los bancos comerciales grandes no creo", agregaron. "La medida puso al dólar spot de punta, es menos oferta de divisas esto", concluyó la misma fuente.
Desde otra entidad, agregaron: "Los bancos grandes como nosotros no llegamos ni de casualidad a tener el 65% de los depósitos en Leliq. El 65% es un límite muy holgado. Quizá los bancos mayoristas o con muy poco patrimonio tengan que adecuarse", explicaron.
"Me parece que el BCRA busca evitar que algún banco al que entra plata de afuera la use para ir a Leliq pero creo que eso es un porcentaje ínfimo de la operatoria. Hoy temprano se especulaba con que esto podía detener la velocidad de la baja pero al final volvió a recortar", agregó la fuente.
"De mediano plazo, puede tener algún efecto bajista sobre las tasas si el crédito no repunta", dijeron desde una tercera entidad.
En noviembre pasado, el BCRA ya había tomado una decisión que apuntaba a limitar el uso de las Leliq para apuestas de corto plazo.
Había subido los encajes a préstamos que toman los bancos desde el exterior, porque había detectado que se colocaban a tasa a corto plazo.
Poco después fuentes de la entidad habían dicho a El Cronista que monitoreaban esos movimientos justamente para evitarlos.
El riesgo, explicaban, es que esos ingresos de divisas aprecien al peso en el corto plazo y generen una devaluación brusca a su salida, como ya se vio el año pasado.
"Como decían las viejas antes de purgarse, hay que curarse en salud", dijo Gabriel Caamaño de Consultora Ledesma. "En el largo plazo, no debería tener efecto sobre la tasa o el dólar", añadió Caamaño respecto de la medida adoptada por el BCRA.
"Aunque hay un efecto ruido inevitable, me la juego que tiene efecto en el dólar hoy lunes, pero debería disiparse rápidamente", agregó.