Los diferentes hechos de inseguridad, la posibilidad de que los delincuentes se escondan en terrenos baldíos o construcciones abandonadas, llevó a que los concejales sanrafaelinos pusieran manos a la obra y solicitaran que se realice una inspección y relevamiento, y que se haga cumplir las ordenanzas para cerrar estos espacios.
Además, velar para que los dueños de baldíos y construcciones abandonadas mantengan esos lugares libres de malezas, basuras, residuos, para que no represente un riesgo y peligro para la salud o seguridad pública.
La propuesta es del edil radical Gustavo Correa Gabbi acompañado por todo el bloque de la UCR. Allí se pide que el Ejecutivo municipal proceda, "en el plazo de 10 días de sancionada la presente pieza, a implementar un plan de inspección y relevamiento a los fines de cursar en carácter de urgente, las intimaciones establecidas en la Ordenanza N° 10.026 y su modificatoria 11.106, dando prioridad a las zonas donde se ubican conserveras y establecimientos en estado de abandono".
Agregó: "En nuestro departamento existen diferentes estructuras edilicias donde funcionaba algún tipo de establecimiento, que en la actualidad se encuentran en completo abandono, sirviendo como "guarida" para delincuentes.
"Siempre estamos preocupados porque suelen meterse muchachos ahí y uno no sabe qué hacen; si toman o algo así", señaló Marta, una vecina de la ex conservera Valle de Oro, ubicada en el barrio de Pueblo Diamante, al sureste de la ciudad. Se trata de un lugar que lleva mucho tiempo en desuso, donde incluso se metió gente a vivir en condiciones muy precarias en varias ocasiones, y que representa además un peligro en cuanto a salubridad, ya que al estar abandonado proliferan las ratas y otros animales.
"Hicimos varias notas, incluso se dijo que se iba a hacer un espacio recreativo para los chicos, pero parece que esto tiene un dueño que no lo permite", comentó la mujer.
La ordenanza 10.026 que data de agosto de 2010 establece que debe realizarse el cierre de los terrenos ubicados dentro de la ciudad de San Rafael, de "hasta 1.000 m2 de superficie con alambrado olímpico o de otro material que previamente acepte la Secretaría de Ambiente, Obras y Servicios Públicos de la municipalidad y que permita una buena visualización hacia su interior. La altura mínima de los cierres será de 1,80 metro". En lotes con superficies entre los 1.000 y 10.000 m2, el propietario puede elegir realizar el cierre con alambrado de cuatro hilos, postes y trabas.