La comunidad de un pequeño pueblo llamado Capitán Montoya, en la entrada oeste de San Rafael se vio conmocionada por el robo y destrucción de instalaciones que sufrió el centro de salud 164.
Según explicó el enfermero encargado del lugar, Roberto Giménez, entre la noche del miércoles y las 5.30 de la mañana de ayer, personas no identificadas violentaron una ventana e ingresaron por la parte trasera del edificio (dos de sus costados colindan con campo).
Giménez explicó que los malvivientes luego se dieron a la tarea de romper cuanto encontraron a su paso como por ejemplo "barretearon" puertas que sólo estaban cerradas con el picaporte sin llave. Arrancaron los calefactores y uno de ellos fue abandonado completamente destruido en el campo a pocos metros del edificio.
También usaron esa herramienta para aflojar la grifería de la cocina y las cañerías de un calefón que al parecer intentaron desprender de la pared.
Entre los elementos que se llevaron se pudieron contabilizar tres tensiómetros completos, un otoscopio (usado por el consultorio de pediatría, dos fotoforos del consultorio de ginecología, un compresor de odontología, un anafe de dos hornillas de la cocina, varios artículos de limpieza. Algunos fueron encontrados donde fue descartado el calefactor roto y un medidor de glucemia.
Cabe destacar que se calcula que fue en ese horario ya que a las 5.30 de la mañana llegaron los primeros pacientes de pediatría a hacer la espera para obtener turnos porque la especialistas precisamente atendía ayer.
Se lamentaron porque fue imposible abrir el centro de salud al público situación que se mantendrá hasta que se repongan algunos elementos y se revisen las instalaciones de gas, agua y electricidad que han sufrido daños severos.
En este lugar, que pertenece a la Provincia (hay otros 28 centros que son municipales) se atienden especialidades como pediatría, oftalmología, cardiología, ginecología, obstetricia, clínica médica, nutrición y se reparte leche de un programa materno.
Destacaron que esos alimentos y otros objetos no fueron hallados por los delincuentes porque se encontraban bajo llave en un depósito.
Intervino la seccional 60 de Las Paredes y hasta anoche no había novedades sobre los autores ni el destino de todo lo robado. Este centro de salud fue también objeto de vandalismo y robo en el mes de abril. Los ladrones en esa oportunidad se alzaron con un tubo de gas.