San Carlos: puente y camino para conectar con la ruta 40

Vecinos de Los Alamitos celebraron la inauguración de un paso que les permitirá cruzar el arroyo Yaucha y el anuncio de la realización de la unión Pareditas-El Sosneado.

San Carlos: puente y camino para conectar con la ruta 40

Tras la inauguración del tan ansiado puente que les permite ahora sortear el arroyo Yaucha, los vecinos de Los Alamitos -al sur de San Carlos- anunciaron que avanza el proyecto para abrir un camino de 2,8 kilómetros, que conectará a este poblado con la nueva traza de la ruta 40, que actualmente Vialidad Nacional está construyendo desde Pareditas hasta El Sosneado.

Esta especie de by pass entre ambas rutas es -hasta el momento- el único con posibilidades de concretarse de los tantos que vienen pidiendo los lugareños hace tiempo.

Sucede que la mayoría de las viviendas y casi toda la dinámica productiva de la zona descansa sobre la vieja ruta 40 -que pasa por La Jaula- y necesitan asegurar vías de acceso al que se convertirá en el principal acceso.

Aún cuando está lejos de terminarse, esta obra vial ya hace sentir sus efectos colaterales en los lugareños.

El incremento del interés inmobiliario por la zona y el tendido de alambrado, que forma parte de la nueva traza, llevaron a que muchos particulares aprovecharan el momento para cerrar o apropiarse de campos y huellas, que históricamente sirvieron de paso para los puesteros y el resto de los habitantes del secano sur sancarlino.

Previendo que esto podría ocurrir, el municipio y un grupo de vecinos (que firmaron varias de las notas presentadas) se presentaron en las audiencias públicas que realizó Vialidad Nacional para pedir que aseguraran, al menos, cinco arterias (bypass) para destinarlas al uso público.

Además de la de Los Alamitos; priorizaron la llamada de la Cruz Negra, la que une al punto donde inicia el camino que va a la Laguna del Diamante, la que vincula la zona de Arroyo Hondo con Agua del Toro y -quizá la más necesaria- la que conecta la comunidad educativa de La Jaula con Agua del Toro (esta última en tierras sanrafaelinas).

"Estas huellas han sido históricamente utilizadas por los lugareños para transitar su territorio. Ninguna hoy tiene la declaratoria oficial que asegure que es de uso público.

La circulación de los vecinos queda a voluntad del privado de turno", expuso Ricardo Funes, de Turismo de San Carlos.Bloqueadas con nuevas tranqueras, con candados, con alambrados y hasta a "fuerza de rifles" -según el relato de los mismos lugareños-; estas huellas tradicionales hoy lucen cerradas o en serio riesgo de estarlo. Si hasta los mismos puesteros, acostumbrados generaciones tras generaciones a no tener límite en su llanura, ahora se han puesto a alambrar.

Esta 'veda de paso' impuesta ha suscitado varios conflictos. El mayor se vivió el año pasado, cuando un particular cerró la huella que llegaba a la estancia militar Yaucha y dejó encerradas a unas diez familias, quienes tienen que andar unos 20 kilómetros más de lo normal para salir a la ruta.

Este sendero -conocido como La Cruz Negra- era emblemático en la zona, no sólo porque marcaba el ingreso a los edificios del Ejército, sino también porque era la vía más usada por los pobladores.

Algunas de las que se 'inhabilitaron' en el último tiempo y eran frecuentemente transitadas por los pobladores son: la de Piedras Blancas (a unos 6 kilómetros de Pareditas), la que pasa por la mina de la cantera Granuter, la Cruz Negra y la que conecta la escuela de Las Jaulas con Agua del Toro, pegada al cerro Diamante. Otras enfrentan un riesgo inminente de cierre.

Humberto Pagano, presidente de la Unión Vecinal Los Alamitos, adelantó que existe el visto bueno de Vialidad Provincial para la creación de una traza de 2,8 km, que conectaría la nueva traza de Vialidad Nacional con la vieja ruta 40, donde se encuentra la puerta de ingreso al barrio.

"Todo lo que hemos logrado ha sido uniendo voluntades. Los vecinos trabajando con los funcionarios y con empresarios que colaboran", apuntó Pagano. De esta manera, lucharán para ver concretado este camino, para lo cual ya han realizado gestiones con la entidad que administra los Bienes del Estado, pues se trataría de tierras fiscales.

Desde Vialidad Nacional reconocieron que la propuesta está en marcha, pero que primero necesitan gestionar que los dueños de los terrenos por donde pasaría la ruta hagan la donación pertinente a la Dirección Provincial de Vialidad, para que puedan ser de dominio y uso público.

Cuestión de nomenclaturas

Estas rutas han cambiado tantas veces de nombres entre sí, que no es sencillo saber a qué camino se refiere un turista o un local cuando hablan de la 40 o de la 101, en el tramo que va desde Pareditas hasta El Sosneado. Lo cierto es que hoy coexisten tres caminos. Por un lado, está  la vieja ruta 40, que pasó a ser Ruta Escénica conservando sus atractivos naturales y que circula más pegada a la cordillera.

Por otro lado, está la ruta nacional 101 que, ahora por ser la más moderna,  pasará a formar parte de la ruta 40 que vincula el norte con el sur del país. En un tercer lugar, queda un tramo que es la nueva traza de la 40. La idea de esta megaobra nacional es comunicar a Malargüe con Mendoza, ahorrando unos 100 kilómetros de recorrido (ya que hoy se debe tomar el desvío vía San Rafael a través de las rutas nacionales asfaltadas 144 y 143).

Después de años de reclamos y gestiones con distintos organismos, las 30 familias que residen en forma permanente en Los Alamitos, en el secano sancarlino, la semana pasada cortaron las cintas para inaugurar su reluciente puente sobre el arroyo Yaucha. Gracias a esta estructura, el barrio ya no se quedará más aislado cuando el afluente exponga crecidas en su caudal.

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