Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en Argentina alrededor del 10% de la población padece de Enfermedad Renal Crónica (ERC) y la mayoría desconoce esta condición y no suelen darse cuenta hasta que el problema ya se encuentra tan avanzado que los únicos caminos por transitar son la diálisis o un trasplante de riñón. En total, cerca de 20.000 personas fallecen cada año en el país por causas relacionadas a esta enfermedad.
¿Por qué es importante informarse y cuidar los riñones?
La Dra. Valeria El Haj, Directora Médica Nacional de OSPEDYC define: “los riñones son el gran filtro del cuerpo que ayuda a desechar todas las toxinas que producimos o ingerimos, por medio de la orina. Si este filtro no funciona o se obstruye, nos intoxicamos a niveles que pueden llegar a ser letales”. Y agrega, “por lo tanto, tener unos riñones enfermos también aumenta las posibilidades de sufrir infarto de miocardio y accidente cerebrovascular”.
¿Qué es la Enfermedad Renal Crónica (ERC)?
La Enfermedad Renal Crónica es la alteración del funcionamiento de los riñones por más de tres meses con la consiguiente pérdida gradual de sus funciones. Si bien esta enfermedad suele ser silenciosa, la Dra. El Haj menciona algunos síntomas comunes a los que se debe prestar atención como: cambio en los hábitos de orinar y de sueño, orina espumosa, muy pálida o más oscura de lo normal; presencia de sangre en la orina, hinchazón en los tobillos, pies, piernas o manos; náuseas frecuentes, percepción de sabor metálico en los alimentos, falta de aire (incluso cuando no se realiza ejercicio físico), o dolor externo en la espalda.
Los grupos de riesgo son: fumadores, diabéticos, hipertensos, personas con enfermedades cardiacas o con antecedentes de ACV y personas con antecedentes familiares de cálculos renales o infecciones urinarias recurrentes.
¿Cómo se puede realizar una detección temprana de problemas en los riñones?
Detectar cualquier mal funcionamiento en los riñones es muy sencillo, porque solo basta un simple análisis de sangre y orina. Si los riñones están trabajando como deben, los niveles arrojados por los análisis estarán en sus patrones normales, pero si cualquiera se encuentra fuera de rango, es motivo para realizar un estudio más a fondo.
¿Cómo se pueden cuidar nuestros riñones?
- Hacer ejercicio en forma habitual, ya que esto ayudará a reducir la presión arterial y el riesgo de insuficiencia renal.
- Controlar periódicamente la glucemia.
- Controlar la presión arterial, ya que, además de afectar a los riñones, también perjudica al cerebro y al corazón.
- Comer sano y controlar el peso. Para la mayoría de los pacientes con ERC, se recomienda seguir una dieta que contenga frutas, verduras, legumbres, pescado, aves de corral y granos integrales.
- Reducir el consumo de sal.
- Ingesta prudente de proteínas y calcio, según lo determine el equipo asistencial (médico/a-nutricionista).
- Consumir alrededor de 2 litros de agua al día.
- No fumar.
- No tomar medicamentos sin consultar al médico.
- Hacer controles periódicos de la función renal, sobre todo si se tiene diabetes, hipertensión, obesidad o antecedentes familiares de enfermedades renales.