También es importante tomar conciencia acerca de las técnicas y procedimientos que se deben tener en cuenta ante situaciones de emergencia o cuando una persona enferma o lesionada precisa ayuda.
Se debe promover la concientización sobre la importancia que pueden revestir gestos sencillos a la hora de salvar vidas, tanto en la vida cotidiana como en casos de crisis (desastres, epidemias, conflictos) y motivar a las personas a adquirir conocimientos en primeros auxilios, incorporando información de calidad, discerniendo de los mitos populares porque en la mayoría de los casos se acciona con la idea de ayudar, pero el desconocimiento puede complicar la situación causando efectos adversos.
¿Cuáles son las situaciones en donde los primeros auxilios tienen impacto?
Están divididas en tres grandes grupos:
- Emergencias por lesiones: personas lastimadas con algún elemento punzante; quienes sufren una hemorragia visible en alguna parte del cuerpo o son víctimas de un traumatismo.
- Emergencias médicas: personas con hipoglucemias o que manifiestan problemas respiratorios, sufren ataque al corazón o cuadros de alergias, etc.
- Emergencias medioambientales: son aquellas ocurridas por picaduras, mordeduras, golpes de calor, intoxicaciones, etc.
¿Qué hacer y con qué elementos deberíamos contar frente a una emergencia de este tipo?
Según la Dra. Valeria El Haj, Directora Médica Nacional de OSPEDYC, “es imprescindible que las personas tengan información de calidad, discerniendo de los mitos populares, porque en la mayoría de los casos se acciona con la idea de ayudar, pero el desconocimiento puede complicar la situación causando efectos adversos”.
Al respecto, la profesional aconseja tomar cursos o informarse con fuentes verídicas como instituciones médicas y tener en cuenta reglas generales como:
- Al acercarse, la persona debe presentarse, explicar que tiene conocimientos de primeros auxilios y consultarle si es posible ayudar.
- Es imprescindible observar alrededor y verificar las condiciones del lugar para no exponerse al peligro, buscando siempre la seguridad del mismo.
- No mover a la persona enferma o lastimada.
- Llamar al servicio de emergencia del lugar (ambulancia), transmitiendo la dirección exacta de donde nos encontramos, para que nos localicen sin inconvenientes, accionando la cadena de supervivencia, la cual hace referencia a una serie de pasos y de acciones a seguir ante una víctima que está padeciendo una situación de emergencia sanitaria, como puede ser un ataque al corazón o una parada cardiorrespiratoria. La realización correcta de estos pasos hará que las posibilidades de supervivencia de la víctima sean mayores y que, los daños y secuelas que pueda ocasionar disminuyan.
- Manejar la situación buscando la calma y evitando el descontrol.
- No tocar en forma directa ningún tipo de secreciones.
Además, es destacable contar con herramientas que ayuden al desempeño de los primeros auxilios. Para ello, sería necesario contar con un botiquín, es decir una lista de elementos que puedan ser transportables y se encuentren ubicados en un espacio conocido por todos.
Los elementos básicos que no deberían faltar son:
- Jabón neutro (blanco): para higienizar heridas.
- Alcohol en gel: para desinfectar de manera rápida las manos.
- Termómetro: para medir la temperatura corporal.
- Guantes descartables de látex: para no contaminar heridas y para seguridad de la persona que asiste a la víctima.
- Gasas y vendas: para limpiar heridas y detener hemorragias.
- Antisépticos como yodo povidona o agua oxigenada: para limpiar las heridas.
- Tijera: para cortar gasas y vendas o la ropa de la víctima.
- Cinta adhesiva: para fijar gasas o vendajes.
Existen otros productos denominados complementarios a tener en cuenta:
- Antiparras: como barrera de protección para enfermedades.
- Máscara de reanimación cardiopulmonar con válvula unidireccional: para practicar RCP de forma segura.
- Alcohol al 70%: para la limpieza de instrumental de primeros auxilios.
- Linterna: para examinar al lesionado, por ejemplo, si presenta un cuerpo extraño en la boca.
- Solución salina normal (fisiológica): para la higiene de grandes heridas y para el lavado y descontaminación de lesiones oculares.
- Pinza larga sin dientes: para la sujeción de gasas.
- Anotador y lapicera: para registrar datos que puedan ser solicitados o indicados por el servicio de emergencias médicas.
- Pañuelos grandes: para vendaje de miembros.
“Informarnos y prepararnos para actuar en momentos de crisis es una necesidad para complementarnos como seres sociales, auxiliando de forma exitosa incluso al punto de salvar vidas, y para lograrlo el conocimiento es la mejor prevención”, comenta la Dra El Haj.
Por eso, a continuación desmitifica algunas situaciones:
- Cuando se tiene un ojo morado, es común que le apliquen un pedazo de carne cruda: éste solo proporciona frío y presión, pero no hay ningún beneficio médico probado de que ayude.
- Es común que cuando alguien este teniendo un ataque, le coloquen algo en la boca para que no se ahogue: no se debe sujetar porque podría causar una lesión. Lo primordial es que no se lastime con objetos alrededor.
- Ante un corte o herida suelen poner alcohol sobre ellas, con el fin de limpiarlas: el agua es suficiente para limpiar cualquier herida, más tratándose de una de no muy gran magnitud.
- Si un brazo o pierna está sangrando mucho, hay que hacer un torniquete por encima de la herida: la medida es totalmente errónea. Es una maniobra que puede interrumpir todo el flujo sanguíneo y causar, además, daño a los tejidos. Lo que hay que hacer es una presión directamente sobre la herida con apósitos estériles y limpios para lograr que coagule y disminuya el sangrado
- Cuando sangra la nariz, echar la cabeza para atrás: podría generar que la sangre se vaya a los pulmones o hacia el estómago, provocando vómitos. La solución es apretar la nariz por unos minutos.
- Ante quemaduras colocar manteca o pasta dental encima: lo que se logra es aislar el calor, producir cicatrices y probablemente originar una infección. Lo recomendable es usar agua potable para limpiar la zona.
- Si un chico toma lavandina hay que hacerlo vomitar: puede causar más daño cuando el vómito abandona el organismo, ante una intoxicación, hay que llamar a los teléfonos de emergencias toxicológicas y seguir sus indicaciones. Jamás hay que provocar el vómito.