El linfoma es un tipo de cáncer de la sangre que se manifiesta en órganos del sistema linfático, mayormente desconocido por los pacientes, pero con una gran relevancia: cada 90 segundos se diagnostica a una persona en el mundo, y produce alrededor de 200 mil muertes al año. Sin embargo, detectarlo en un estadio temprano, condiciona un mejor pronóstico.
En este sentido, con el fin de difundir información sobre esta patología y generar concientización y prevención, cada 15 de septiembre se conmemora el Día Mundial de Concientización del Linfoma. Esta conmemoración se debe a una iniciativa de la Coalición Linfoma (organización mundial de personas afectadas de linfoma) representada en argentina por Linfomas Argentina con el apoyo de la Unión Internacional Contra el Cáncer.
“Los linfomas son un tipo de cáncer de la sangre que comienza a exhibirse en general por el aumento del tamaño de algún o algunos ganglios linfáticos. Representa la quinta causa de muerte por cáncer en el mundo, junto con la leucemia y el mieloma”, explicó la Dra. Virginia Prates (MN 82891), Directora Médica del Laboratorio Varifarma y agregó “existe un fuerte desconocimiento en torno a esta enfermedad. De hecho, la gran mayoría de los pacientes ignoraban qué era el linfoma antes del diagnóstico. Además, enfatizó “por esta razón, es vital difundir sus síntomas y estimular la consulta médica para ayudar a los enfermos con un diagnóstico temprano”.
Hay que resaltar que es uno de los cánceres menos conocidos y que más ha crecido en incidencia en todo el mundo. Incluso, sus síntomas son fáciles de confundir con otras enfermedades, como por ejemplo: escalofríos, pérdida de peso, cansancio, hinchazón del abdomen, dolor o presión en el pecho, tos o dificultad para respirar, entre otros. Asimismo, el signo más frecuente es el aumento de tamaño de un ganglio linfático que se sitúa en el cuello, axilas o ingles.
La especialista detalló que existen dos grandes categorías de linfomas: linfoma de Hodgkin (LH) y linfoma no-Hodgkin (LNH), ésta última es la más frecuente y afecta a cuatro de cada cinco pacientes con linfoma. Además, manifestó que hay más de 60 tipos diferentes de linfoma no-Hodgkin (LNH), y que pueden ubicarse en dos grupos: agresivos o indolentes. El tipo de LNH indolente produce un crecimiento lento y el más frecuente es el linfoma folicular (LF), presente en 25% de todos los pacientes. El subtipo más frecuente de la variante agresiva es el linfoma difuso B de grandes células, en este sentido, precisó que como existen muchos tipos de linfoma hay que examinar y saber con exactitud qué tipo se tiene ya que es la clave para desarrollar un plan de tratamiento eficaz. De esta manera, la investigación muestra que hacer analizar la muestra de biopsia por un patólogo experto mejora las posibilidades de un diagnóstico preciso.
Existen distintas terapias como la radioterapia, la quimioterapia o una combinación de ambas. La elección de los tipos de tratamiento depende de varios factores, uno de ellos el estadio en el que se encuentra el linfoma. Es indispensable asegurar que en estos últimos años se han producido grandes avances gracias al mejor entendimiento de la enfermedad, concientización y medicamentos que permiten un mejor resultado en el control efectivo de la enfermedad con la consecuente mejoría en el paciente.
“Para el tratamiento se utilizan drogas quimioterápicas y en algunos casos anticuerpos monoclonales o una combinación de ambas u otros agentes más novedosos conocidos como terapias de blanco específico”, señaló la Dra. Prates.
Por último, la hematóloga afirmó que “esta fecha es de suma importancia para concientizar a la sociedad de esta enfermedad que, a pesar de ser desconocida, simboliza la quinta causa de muerte por cáncer en el mundo” y agregó “es clave la consulta médica precoz para garantizar rápidamente la detección”.
Asesoró: Laboratorio Varifarma