Llega el invierno y con ello el intenso frío que sufrimos los mendocinos a causa de las heladas tan comunes en nuestro territorio. A raíz de esto, durante esta época del año las familias mendocinas suelen tener las estufas prendidas durante períodos prolongados y en espacios cerrados, lo cual es un peligro para la liberación de Monóxido de Carbono (CO).
El Monóxido de Carbono es una sustancia tóxica resultante de la combustión deficiente de una fuente energética, como lo es el gas natural, y que al ingresar al cuerpo a través de la respiración puede provocar dolor de cabeza, náuseas, vómitos, desmayos e incluso la muerte.
Como este gas es incoloro e inoloro, es bastante fácil cometer el descuido de aspirarlo y correr graves peligros de salud. Según estadísticas nacionales anunciadas a través de la página del Gobierno de Mendoza, por año se presentan 500 casos de intoxicación por monóxido de carbono, mientras que 50 son las personas que mueren envenenadas por esta causa. En la Argentina el 72% de los accidentes son a causa del mal funcionamiento de los artefactos o el uso indebido de cocinas y hornos para calentar habitaciones.
Causas que provocan la producción de CO
Las causas que generan la producción de Monóxido de Carbono son: insuficiente ventilación en el ambiente en donde hay combustión, instalación de artefactos en lugares inadecuados, mal estado de los conductos de evacuación de los gases de la combustión, deteriorados o mal instalados, quemador de gas con la entrada de aire primario reducida, acumulación de hollín u otro material en el quemador.
Señales que hay que advertir para prevenirlo
Existen algunas señales que pueden hacer sospechar de la existencia de CO en el ambiente, por ejemplo: llama de color amarilla o naranja, en lugar de la azul normal. Aparición de manchas, suciedad o decoloración de los artefactos, sus conductos de evacuación o alrededor de ellos.
Acciones a tener en cuenta evitar el CO
- No instalar calefones, estufas infrarrojas, catalíticas o de llamar abierta, en baños, dormitorios o ambientes cerrados. Solo deben colocarse artefactos de tiro balanceado.
- Todas las instalaciones de gas, la colocación de artefactos y su reparación deben ser efectuadas por gasistas matriculados.
- Verificar el buen funcionamiento de los tirajes o conductos de ventilación, de modo que no estén obstruidos, estrangulados, fisurados desconectados o abollados.
- Revisar periódicamente el estado de las instalaciones internas de gas del hogar por medio de un gasista matriculado.
- Evitar la saturación de ambientes con artefactos de calefacción.
- No usar hornos para calefaccionar ambientes.