En Argentina, se calcula que 450.000 personas sufren alguna discapacidad auditiva de las cuales 70.000 son hipoacusias severas-profundas que requieren implantes cocleares.
Actualmente, y hace más de 60 años, una de las soluciones más eficaces para la hipoacusia, es el implante coclear, el primer sustituto del oído. Gracias a este sistema, muchas personas que padecen pérdida auditiva neurosensorial de severa a profunda pueden entender el habla en diferentes tipos de entornos de escucha.
“Lo más importante es tomar conciencia de lo importante que es la pérdida auditiva, y que hoy disponemos de mucha tecnología para revertir esto. El hipoacúsico es una persona muy aislada, no se puede integrar, y esto trae un deterioro psíquico muy importante, por eso en este día en el que se conmemora el día del implante coclear, el mensaje es que la hipoacusia se puede tratar y podemos reinsertar a todas las personas con hipoacusia en el mundo sonoro” concientiza el Dr. Mario Zernotti, Jefe de Otorrinolaringología del Sanatorio Allende y referente de MED-EL.
¿Cómo funciona un implante coclear?
Los implantes cocleares están diseñados para las personas que padecen de hipoacusia neurosensorial de severa a profunda. Con este tipo de pérdida auditiva, las células ciliadas del oído interno están dañadas y no pueden captar los sonidos debidamente. Un implante coclear evita estas células ciliadas dañadas y envía señales eléctricas al nervio auditivo, donde se interpretan como sonido.
El implante coclear consta de dos partes: un procesador de audio externo, que está situado detrás de la oreja, y un implante interno, que se coloca debajo de la piel, mediante una cirugía sencilla y de corta duración. Ambas partes se encuentran unidas por un imán.
Sin límite de edad para un implante coclear
Hoy día, tanto bebés desde 1 año hasta adultos de la cuarta edad pueden acceder a este tipo de tecnología, así como también personas con discapacidades múltiples. En el caso de niñas y niños con pérdida auditiva son candidatos perfectos para un implante coclear, por eso es tan importante el diagnóstico temprano con un profesional.
¿Cuáles son los signos de alarma?
Según el Dr. Zernotti, la principal alarma se detecta en la casa, con la familia, sobre todo en bebés y niños ya que no adquiere el lenguaje en el momento que debe hacerlo, ante un sonido fuerte no percibe ni reacciona, suele tener una actitud aislada y agresiva en la escolaridad (guardería) y por supuesto esto deriva en no lograr integrarse.
“Lo más preocupante, es que la OMS ha dicho que el 5% de la población mundial tiene una hipoacusia discapacitante, por lo que en Argentina esto representa un número muy grande de personas, y esto se traduce entonces en que no es solo la niñez en dónde se presenta, sino también la adultez”, explica el especialista. Y agrega que: “Nos vamos volviendo más grandes y escuchamos menos, porque vivimos en ciudades extremadamente agresivas desde lo sonoro”.
¿Cuál es la causa de la pérdida auditiva?
La hipoacusia es una disminución auditiva que puede darse en diferentes grados, desde una pérdida auditiva leve o moderada hasta una pérdida auditiva severa o profunda. La parte del oído que se encuentre afectada determinará el tipo de pérdida auditiva y el tipo de tratamiento necesario.
Las causas de la hipoacusia son variadas y diversas. Esta puede estar asociada a causas genéticas, enfermedades o factores de riesgo durante el embarazo o puede darse en el momento del nacimiento. Asimismo, también puede aparecer durante los primeros años de vida o en una edad avanzada de la vida de la persona.
Recomendaciones:
- Cumplir con los chequeos prenatales y ginecológicos, en el caso de las mujeres que se encuentren cursando un embarazo
- Realizar controles auditivos a los bebés recién nacidos (otoemisiones acústicas)
- Hacerse chequeos auditivos al menos una vez por año.
“No hay edad para la hipoacusia: esta puede aparecer a lo largo de toda la vida“, resalta el Dr. Zernotti. “Hoy tenemos una legislación de avanzada con una ley de detección temprana y con una tecnología que se encuentra dentro del PMO (Programa Médico Obligatorio) razón que resulta muy buena para toda la población Argentina que la padece”, finaliza el profesional.