Deteniéndonos en qué implica esta condición, la Asociación Argentina de Ayuda a la Persona que Padece Esquizofrenia y su Familia (APEF) la define como un padecimiento mental que se manifiesta por múltiples signos y síntomas que involucran el pensamiento, las emociones, la percepción, el movimiento y la conducta[1].
Particularmente en Argentina, como informa la AAFE, sobre la base de una población de aproximadamente 45 millones de habitantes, el total de personas afectadas de esquizofrenia se ubicaría en el rango de 300.000 a 500.000[2].
“Las personas con esquizofrenia suelen ser estigmatizadas”, comentó la Dra. Paula Barreyro, Directora Médica de Janssen Latinoamérica Sur, y continuó “si bien no hay cura para la enfermedad, los pacientes con esquizofrenia pueden vivir vidas significativas y más independientes con un abordaje de tratamiento integral y adecuado que debe incluir tanto la farmacoterapia como la y psicoterapia. Es decir, deben contar con una atención integral e integrada y apoyo social”.
Actualmente, existen tratamientos antipsicóticos de acción prolongada que demuestran que el 93% de los pacientes no experimentan un retorno significativo de los síntomas de esquizofrenia. Con una administración mensual o cada tres meses, los pacientes logran mejorar significativamente la adherencia al tratamiento, permitiendo que puedan enfocarse más en los otros aspectos de su plan de tratamiento[3].
Hoy en día no existen estudios clínicos para diagnosticar trastornos psiquiátricos tales como la esquizofrenia. Los diagnósticos se realizan después de una entrevista a fondo con la persona y sus familiares, conducida por un psiquiatra y mediante un examen físico. Sin embargo, algunos síntomas que podrían indicar que una persona padece la enfermedad son[4]:
- Síntomas positivos: alucinaciones, delirios, pensamientos desordenados y agitación.
- Síntomas negativos: falta de motivación, retraimiento social, apatía, insensibilidad emocional.
- Síntomas cognitivos: inconvenientes en el aprendizaje, falta de memoria y/o atención, problemas en el lenguaje.
A causa de la desinformación sobre esta condición, existen muchos mitos, prejuicios y etiquetas para hablar de las personas que tienen esquizofrenia. Por ello, es fundamental reforzar sobre la eliminación de etiquetas y acompañar a familiares y personas con esquizofrenia. El foco y la misión de la sociedad tienen que estar en quitar el estigma que acarrea la enfermedad, para así permitir que las personas con esquizofrenia y sus familiares puedan alcanzar vidas más plenas.
Asesoró: Janssen
[1] Fuente: APEF (La Asociación Argentina de Ayuda a la Persona que Padece Esquizofrenia y su Familia). Disponible en: http://apef.org.ar/sobre-esquizofrenia/que-es/
[2] Fuente: Télam. Disponible en: https://www.telam.com.ar/notas/202105/555244-afirman-que-siete-de-cada-diez-personas-con-esquizofrenia-no-logra-acceder-a-tratamientos-adecuados.html
[3] Fuente: Janssen. Disponible en: https://www.janssen.com/argentina/
[4] Fuente: Jannsen. Disponible en: https://www.janssen.com/argentina/educaci%C3%B3n-en-salud/esquizofrenia.