Cada año, cientos de pacientes son diagnosticados de enfermedades que requieren tratamientos que contengan células progenitoras hematopoyéticas (CPH). Estas células provienen de la médula ósea y son las encargadas de producir los componentes de la sangre.
“A diferencia de otras prácticas médicas, la donación de médula ósea requiere de la participación y compromiso de la sociedad con el objeto de ayudar a quienes sufren diferentes enfermedades que pueden tratarse con estas donaciones. Según datos del Ministerio de Salud Nacional el 75% de los pacientes no tienen donante compatible en su familia. Para compensar esta carencia, la persona interesada podrá donar sangre en los centros habilitados para quedar inscripto en el Registro Nacional de Donantes de CPH -médula ósea o sangre periférica-,” explica la Dra. Valeria El Haj, Directora Médica Nacional de OSPEDYC.
Actualmente, todas las personas entre 18 y 40 años que gocen de una buena salud pueden estar inscriptos. De la unidad de sangre donada, se toma una muestra de vital importancia para realizar el análisis del código genético (HLA). Asimismo, los datos obtenidos se ingresan a la base del Registro Nacional; quienes comparten la misma con una Red Internacional que agrupa a más de 28 millones de donantes de todo el mundo.
“Las CPH sólo se donarán si hay un paciente necesitado que sea 100% compatible con el código genético (HLA)”, agrega la Dra El Haj.
¿Quiénes necesitan donación de Médula Ósea?
Pacientes con enfermedades como leucemia, anemia aplástica, linfoma, mieloma, errores metabólicos o déficit inmunológicos pueden ser tratados con un trasplante de médula ósea. “En una primera etapa, para efectuar el trasplante de CPH, al paciente se le destruyen las células enfermas mediante tratamientos que combinan quimioterapia y/o radioterapia, para luego infundir las células extraídas del donante” detalla la Dra. El Haj. De esta forma, las células trasplantadas comenzarán a producir células sanguíneas propias en un plazo relativamente corto.
“A través del Registro Nacional de Donantes Voluntarios cada voluntario podrá donar una vez por cada extracción. Las células donadas se regeneran rápidamente; al mes de la extracción, la persona ya estará en condiciones de donar nuevamente. Por lo tanto, si un familiar necesitara su donación, podría hacerlo nuevamente sin inconvenientes”, concluye la profesional.
Desde el año 2003 Argentina cuenta con Registro Nacional de Donantes de Células Progenitoras Hematopoyéticas (CPH), el cual funciona en el INCUCAI y ha permitido incrementar cada año la lista de argentinos que se suman a la Red Mundial de donantes voluntarios.