La negociación salarial en el sector de la Salud sigue lejos de tener una resolución, ya que finalizada la conciliación obligatoria, la paritaria de ayer constituyó una nueva frustración para las partes.
Es que el ofrecimiento del 25% de aumento, en dos cuotas, una del 20% a partir de abril y otra del 5% desde el 1 de mayo fue rechazada plenamente por ATE y Ampros, que consecuentemente anunciaron un paro de 48 horas para el próximo 29 y el 30 de abril, movilización a la Legislatura el 1 de mayo (cuando el gobernador Francisco Pérez inicie las sesiones legislativas ordinarias) y otra huelga de 72 horas para el 6, 7 y 8 de mayo, "si el Gobierno no reflexiona y presenta una propuesta realmente superadora".
Pero difícilmente suceda eso ya que desde el Ejecutivo anunciaron que si bien harán propuestas, "serán parecidas" a lo que ya han ofertado, dado que los condiciona "la cláusula de garantía firmada con los docentes", tal como explicó el paritario oficial, Mauricio Guzmán.
"Hemos incrementado de $ 424 millones a $ 449 millones el costo salarial para este sector", indicó Guzmán, justificando la propuesta que fue rechazada ayer por los gremios.
En tanto Raquel Blas aseguró que esta oferta "es peor que la anterior", porque no contempla ni siquiera marzo sino que el aumento se otorga desde abril. Efectivamente, la anterior propuesta oficial implicaba un incremento inicial del 15% "a partir del 1 de marzo" y un nuevo ajuste en julio.
Desde los gremios siguen pidiendo un 50% de incremento "sobre el básico de revista", retroactivo a enero y con un "bono adicional" para suplir los descuentos por el impuesto a las ganancias, en los casos necesarios, entre otros ítems.
Tanto Blas como Del Pópolo coincidieron en considerar "estratégico" el tiempo previo a las medidas de fuerza, ya que durante ese lapso "el Gobierno podrá hacer una propuesta realmente superadora" que pueda ser tenida en cuenta por los trabajadores.