Primero vino el orgasmo financiero para la industria editorial, ahora le toca el turno de recibir el suyo a los estudios de cine porque finalmente, con una impaciencia gigantesca y 100 mil entradas en la preventa sólo en nuestro país, se estrena la adaptación a la pantalla grande de las “50 sombras de Grey” de la novelista británica E.L. James, que dirige Sam Taylor-Johnson.
Para aquellos que realmente están algo despistados con este fenómeno editorial estamos hablando de una trilogía erótica de las más exitosas de los últimos años.
¿De qué va? Cuenta en su primer volumen la historia de una estudiante de literatura y además empleada de una ferretería, Anastasia Steele (Dakota Johnson), una chica inocente que cambia su vida para siempre cuando conoce a un guapo aunque atormentado millonario llamado Christian Grey (Jamie Dornan).
Todo comienza con una entrevista a Christian, de donde nace un interés por acercarse cada vez más uno con el otro, aunque Grey, a pesar de ser un empresario exitoso y tener una familia amorosa, es consumido por la necesidad de controlarlo todo, incluso lo relacionado con el sexo.
Juegos de seducción
31 millones de estadounidenses han comprado la trilogía de “50 sombras”. Sus derechos se han vendido a 40 países y finalmente, lo productores del film “Red social” estrenan hoy, a nivel mundial, su adaptación a la pantalla grande.
El éxito, el literario al menos, podría observarse como un estupendo triunfo del manejo del psicoanális, el mercadeo y la dosis balanceada entre romanticismo y erotismo destinado sobre todo a amas de casa.
De hecho, muchos críticos ya calificaron los relatos de Erika Leonard, E.L. James como “porno para mamás”, aunque su caja de lujo de los tres libros se vendan con esposas, máscaras y corbatas y no con un delantal, una tintura y una esponja como accesorios extras.
La fama actual de James, de 49 años, es al mismo tiempo el resultado de haber superado su propia crisis la mediana edad fantaseando con el sadomasoquismo mientras le cocinaba al mismo hombre con el que está casada hace veinte años y tecleaba en su notebook mientras le preparaba la merienda a sus dos hijos adolescentes.
Bah, el sueño americano de cualquier aspirante a novelista en una versión más picante que la iguala o supera como discípula de la auténtica reina del género Danielle Steel.
¿Será un homenaje a ella que su protagonista femenina se llame Anastasia Steele?
Seamos francos. La historia hace eco en millones de otras historias dentro del arquetípico cuento de hadas diseñado para adultos: una piba inocente y virginal (en el libro nunca se describe en profundidad, no se sabe si es bonita, fea, delgada, nada), una empleadita de una tienda es inesperadamente seducida por el macho Alfa perfecto, una versión ultra-metrosexualizada del Príncipe Azul: Grey, un irresistible e inteligente millonario. Todo junto en un mismo paquete. La fábula ideal para entretener a aquella ama de casa que después de un día ajetreado se relaja bajo la luz de su velador para seguirle los juegos de seducción a la ferretera y el magnate del jet set.
Sin embargo no hay éxito sin detractores. Un ejemplo de ello es la crítica lapidaria hacia los libros que lanzó en su momento la prestigiosa revista estadounidense Journal of Women’s Health, que publicó un estudio de la Universidad Estatal de Ohio en Columbus afirmando que la trilogía de James “contribuye a perpetuar el problema de violencia de género” y concluyeron que Anastasia sufre serios daños psicológicos como consecuencia de su relación con Christian. “Las interacciones de la pareja son emocionalmente abusivas, caracterizadas por el acoso, la intimidación y aislamiento”, afirmaba esta investigación.
De todas maneras, ya se están armando las filas en los complejos de cine y la ansiedad por ver en imágenes lo que E.L. James contó en sus libros crece por minuto y más de una fanática se irá a ver la peli con una máscara negra y unas esposas para inmortalizar el momento en una selfie.
Un dato más: la película tendrá 20 minutos de escenas con contenido erótico o sexual, convirtiéndose en la número uno de este género con mayor minutos de escenas picantes estrenada en la última década.
Primeras críticas
Ayer miércoles se realizó el avant premier de la película en Berlín.
En nuestro país, las "50 sombras de Grey" tendrá 280 pantallas repartidas en 160 complejos de cines de todo el país.
Las copias serán en formato digital y vendrán con subtítulos y dobladas al castellano a pesar de tener la calificación PM16 con reservas.
A juzgar por las cien mil entradas vendidas por anticipado, se prevee que la cinta sea uno de los fenómenos taquilleros del año en nuestro país.
A continuación, algunas de las primeras reseñas:
Variety: “Habilidoso ejercicio a la hora de manejar con cuidado el nivel de excitación, más afilado que en la mayoría de películas de estudio para adultos, pero por lo demás una provocación bastante suave en esta era saturada de porno”.
The Hollywood Reporter: “La película es, por definición, una propuesta más fuerte que el libro porque elimina el montón de descripciones repelentes y monólogo interno que conducen el texto fuertemente hacia la auto-parodia”.
The Guardian: “Las escenas de sexo en ‘50 sombras de Grey’ son numerosas, largas y sinceras, pero no son obscenas”.
The New York Post: “Con todo, la película nunca pretende ser otra cosa que lo que realmente es: porno blando para las mujeres, diluido con una calificacion R”.
El New York Daily News: la directora y sus guionistas “Han despojado al primer libro de sus mayores fallos, mientras honran su esencia. Ganan puntos simplemente por cortar los múltiples excesos de la novela”.
Recordemos que la colilla de la película fue la más vista de 2014.