Recientemente, durante una visita realizada a La Paz por parte del gobernador de la Provincia, para inaugurar obras de infraestructura por un monto de 34 millones de pesos, Francisco Pérez señaló que intentará impulsar al departamento como un polo de desarrollo industrial.
Sucede que, a pesar de encontrarse sobre la principal ruta de acceso a Mendoza y de ser la denominada "puerta de entrada" a la provincia, La Paz es una de las jurisdicciones más postergadas. Cuenta con una escasa actividad agrícola e industrial y una de sus mayores actividades se concentra en Desaguadero, con el evidente peligro que significa -a futuro- la importante infraestructura que ha desarrollado San Luis a pocos kilómetros al este, donde comienza la doble vía que cruza la vecina provincia.
No resulta difícil determinar los motivos de esa postergación. El clima de La Paz es desértico, con escasas precipitaciones anuales, mientras paralelamente se encuentra al final del río Tunuyán que con dos diques aguas arriba, El Carrizal y el Phillips, provocan que el cauce del río se mantenga casi seco durante todo del año. Esa escasez de agua ha determinado que la actividad agrícola sea casi nula y que los habitantes hayan derivado las posibilidades económicas hacia la ganadería, tanto bovina como caprina y hacia la apicultura, con una producción de miel de alta calidad.
Por otro lado, los regímenes de promoción industrial que en las últimas décadas favorecieron a San Juan, La Rioja, Catamarca y esencialmente a San Luis -para el caso de La Paz- generaron que sean muy bajas las inversiones que se realizan en el departamento. De allí que resulta importante el anuncio del gobernador al hacer hincapié en la necesidad de hacer de La Paz un centro de desarrollo industrial que posibilite la instalación de empresas importantes que generen puestos de trabajo y un mayor desarrollo para la zona.
Por de pronto, la inversión de más de 30 millones de pesos para la reconstrucción de la ruta provincial 77, que unirá en un tramo de 81 kilómetros al paraje La Gloriosa, en La Paz, con el empalme con la ruta nacional 146 en San Rafael, resulta importante en razón de que implica un avance para el desarrollo de la ganadería y permitirá a los paceños sumarse a la cada vez más importante ganadería de las zonas áridas que contiene a departamentos del Sur y del Este provincial. Según se afirma, la mejora en el tramo de la ruta permitirá la circulación de más de 30 mil cabezas de ganado por año. Más aún cuando en zonas del departamento funcionan algunos establecimientos que, en base al denominado sistema de campos rotativos, permiten el engorde de ganado.
Es de esperar que el anuncio oficial de impulsar el desarrollo industrial en el departamento se concrete en hechos puntuales en el corto y mediano plazo. La Paz se encuentra en una posición estratégica inmejorable, que sólo necesita el apoyo y la preocupación de las autoridades provinciales para despertar definitivamente como un departamento importante para la provincia. Así lo exigen también los poco más de 10 mil habitantes que semanas atrás y como un hecho más que inquietante, llegaron a indicar que esperaban la apertura del complejo que ha desarrollado San Luis en el límite con Mendoza porque se ampliaban así sus posibilidades de fuentes de trabajo.
