Alejandro Sabella se fue a dormir el viernes con dudas en su cabeza. No sabía si sostener a Gago en el equipo, de flojo rendimiento en el Mundial. Ya tenía decidido sacar a Fede Fernández y poner a Demichelis. También, ubicar a Basanta por la izquierda en lugar del suspendido Rojo. Pero la duda se acostó a dormir con él y recién en la mañana de ayer se despidió. El DT se decidió y tachó el nombre del jugador de Boca para poner a Biglia. Y no se equivocó. Como tampoco lo hizo con los movimientos que dispuso en el equipo antes y durante el partido con Bélgica.
Biglia, con pasado en el fútbol belga, estuvo a la altura. Lo suficiente como para ganarse un lugar también en el equipo que irá por el pase a la final. Con él, la Selección ganó en contención en la mitad de la cancha y encontró un socio ideal para Mascherano, quien se venía bancando todas las paradas casi sin compañía en el medio. También aportó con juego.
Otra duda que se sacó Sabella, pero varias horas antes, fue la de quién acompañaría a Garay en la zaga central. Y se definió con buen tino. Eligió a Demichelis y el jugador del Manchester City, que tan mal la pasó en los cuartos con Alemania, en 2010, jugó con firmeza y le transmitió al fondo una seguridad que se reflejó en sus compañeros de línea. Garay, Zabaleta y Basanta fueron mejores junto a él. Aunque era obligado, el ingreso de Basanta hizo que Rojo no se extrañara.
Antes de decidir, Sabella vio lo mismo que la gente y los periodistas. Gago y Fede Fernández eran, junto a Higuaín, los puntos flacos del equipo. Y aunque parecía difícil que el entrenador modificara más de un nombre, sorprendió y acertó, porque sacó a los que tenía que sacar. Pero esta vez no solo acertó al armar la formación titular. También lo hizo con los cambios, especialmente con el imprevisto de la lesión de Di María. El jugador del Real Madrid, ubicado en la derecha, tuvo que ser reemplazado y en su lugar ingresó Pérez. Y el ex Tomba cumplió con creces. Ayudó en la marca, sirvió como arma para salir de contra y abrir la cancha por su sector.
“Estoy contento porque hicimos historia. Siento una gran alegría por el grupo de jugadores, hicieron un partido excelente, y también por todos los argentinos porque después de 24 años podemos estar entre los cuatro mejores del mundo. Cumplimos el objetivo de mínima de llevar a Argentina al lugar que se merece y ahora vamos por más”, comentó Sabella.
Sobre el rendimiento del equipo, el DT dijo: “Fue muy equilibrado, tuvo las líneas cerca, a veces más adelante y a veces más atrás pero en general muy bien. Los chicos que entraron lo hicieron muy bien, Pérez jugó un muy buen partido, estuvo confiado, mostró temperamento, carácter, ayudó en la marca, en el conjunto del equipo”. Y también dijo: “Messi jugó un gran partido, tuvo la pelota, juntó tres rivales para que otro compañero reciba con ventaja; cada pelota que tiene en sus pies es esperanza para nosotros y un compromiso para el rival. Lo que él influye es determinante. La semi será difícil, veremos cómo está la tropa y a partir de ahí ver el equipo que vamos a formar”.
Lionel Messi: "Disfruten, sigamos soñando todos juntos, cada vez falta menos"
Lionel Messi, celebró el pase a semifinales con una frase que refleja toda la ilusión de este equipo: “Disfruten, sigamos soñando todos juntos, cada vez falta menos”, dijo el crack del Barcelona al final del encuentro en el estadio Mané Garrincha.
Para el cuatro veces Balón de Oro (2009-2012), este probablemente fue el mejor partido que Argentina ha disputado en el Mundial de Brasil. “Creo que sí. Creo que hicimos un partido muy completo, si bien no creamos muchas situaciones de gol, creo que ellos no tuvieron situaciones claras, era todo pelotazo; tienen gente alta, pero así y todo...”, comentó La Pulga.
Tras ser campeón en 1986 y subcampeón en 1990, esta es la primera vez que Argentina se vuelve a ubicar en semifinales: “Es algo increíble. Sabíamos que iba a ser difícil, que Argentina hace muchos años que no conseguía esto y somos nosotros quienes rompemos esa barrera (de los cuartos de final)”.
Messi, más que un delantero, fue un armador de juego, retrasándose unos pasos en el ataque, y participó de la jugada que Gonzalo Higuaín convirtió en gol a los 8 minutos. “Hoy (por ayer) tuvimos el compromiso de correr, sabíamos que teníamos que ayudar. No les dimos espacio a ellos. Lo importante es que se ganó y pasamos”, cerró Messi.
