Jorge Sampaoli se encuentra por estos días en Europa realizando un recorrido de un mes por distintos países con el objetivo de realizar la última selección de jugadores de cara a Rusia 2018, y en ese camino ya detuvo su marcha en el viñedo futbolístico más importante del Viejo Continente, Barcelona, donde se encontró con quien puede garantizarle la mejor cosecha mundialista dentro de seis meses: Lionel Messi.
El entrenador argentino viajó el primer día hábil de este año hacia Sevilla, donde se reunió con los convocables Gabriel Mercado, Éver Banega, Guido Pizarro, Nicolás Pareja y Joaquín Correa y el pasado sábado estuvo presenciando en el estadio de su ex equipo el clásico de la ciudad que ganó Betis por 5 a 3.
Posteriormente, el casildense, que en esta oportunidad y a diferencia de las dos giras anteriores que se extendieron por espacio de dos semanas, permanecerá un mes entero recorriendo Europa e incorporó a un miembro más como acompañante, el preparador físico Jorge Desio, que así se sumó a su ayudante de campo y mano derecha, Sebastián Beccacece, y su jefe de prensa personal, Ezequiel Scher, se trasladó a Barcelona, donde el domingo pasado presenció el encuentro entre el conjunto local y Levante (3-0).
Ese lugar no solamente contó en esta oportunidad con el mencionado encuentro con el capitán Messi y con Javier Mascherano, a punto de marcharse al Hebei Fortune chino en los próximos días, sino con el hecho de que servirá de concentración y campo de entrenamiento del seleccionado argentino desde el 1 de junio y por espacio de 10 días, antes que la delegación se instale en Moscú.
El plantel argentino se concentrará en la Ciudad Deportiva de Barcelona, situada en Sant Joan Despí, una zona muy cercana a la residencia de Messi en Castelldefelds, algo que será importante para el rosarino que para entonces será padre por tercera vez, ya que su esposa Antonela Rocuzzo aguarda para principios de mayo al tercer hijo varón de la familia detrás de Thiago (cinco años) y Mateo (dos).
Desde allí y rumbo a Madrid se trasladó el miércoles Sampaoli junto a su pequeña comitiva, con un objetivo igual de breve: presenciar el entrenamiento de ayer de Atlético Madrid y entrevistarse con los volantes Augusto Fernández y Ángel Correa, de buen presente en el conjunto dirigido por Diego Simeone.
De hecho hoy mismo estará nuevamente sobre un avión, volando hacia Inglaterra. Claro que si en las horas previas a la partida hay un hueco en la agenda del técnico “colchonero”, procurará un encuentro largo con el “Cholo”.
Pero si de entrevistarse con colegas se trata, Sampaoli ya está muy conforme de antemano con los encuentros que tiene programados en Inglaterra nada menos que con los entrenadores de los dos Manchester, el español Josep Guardiola, del City, y el portugués José Mourinho, del United.
Y precisamente en suelo inglés será donde por mayor tiempo se establecerán Sampaoli y su gente, casi 10 días, lapso en el que presenciará cinco encuentros de la Premier League en la que obviamente actuarán futbolistas argentinos, pero fundamentalmente establecerá contacto con Marcos Rojo (Manchester United) y Ramiro Funes Mori (Everton), para ver como evolucionaron de sus respectivas lesiones ligamentarias, y en que condiciones se encuentra el arquero Sergio Romero, con poca actividad en el equipo de Mourinho.
Por supuesto que no estarán exentos de una charla Sergio Agüero y Nicolás Otamendi, ambos atravesando un gran momento en Manchester City, el único equipo al que verá dos veces durante esta gira por tierras británicas.
El primer encuentro de la Premier que observarán Sampaoli y sus acompañantes tendrá lugar el sábado próximo en Londres, donde el Tottenham Hotspur de otro santafesino, Maurio Pochettino, recibirá a Everton. En tanto el domingo observará pro primera vez a Manchester City, para lo que en la oportunidad se trasladará en tren 350 kilómetros hasta Liverpool.
Y el lunes continuará la saga a 50 kilómetros de Liverpool, en Manchester, donde presenciará el cotejo entre el United y Stoke City. Después de ese partido será el tiempo de las mencionadas charlas con los futbolistas que actúan en los dos clubes de la ciudad y sus respectivos entrenadores.
Recién el sábado 20 estará Sampaoli retornando a los estadios, en su último día en Inglaterra, ya que aprovechando que el día anterior estará en Londres hablando con Manuel Lanzini y, quizá sorprendentemente para muchos, con Pablo Zabaleta (desde que llegó al equipo de la capital inglesa tras su salida del City recuperó su nivel), asistirá al encuentro entre el equipo en que actúan ambos, West Ham United, y el Bournemouth.
El último partido al que asistirá en Inglaterra tendrá lugar horas después, el domingo, nuevamente en Manchester, donde observará por segunda vez a los “Citizens”, que en la oportunidad recibirán a Newcastle.
Después de ese periplo inglés, el lunes 22 el cuarteto técnico estará ya en Italia para el tramo final de esta última cosecha premundialista, en la que apuntará a sacarle el mejor jugo a algunas uvas que todavía no alcanzaron su punto justo de maduración en el seleccionado, tales los casos de Paulo Dybala y Mauro Icardi.
Ese mismo día en Turín estará Sampaoli observando justamente los desempeños de Dybala y alguien con quien sostendrá una reunión clave: Gonzalo Higuaín, durante el encuentro que la Juventus protagonizará con el Genoa, por la Serie A del "calcio".
Con ambos se reunirá el día después de ese partido, para luego trasladarse a Milán, donde mantendrá otros dos encuentros, con Lucas Biglia para constatar la evolución de la tendinopatía rotuliana de la rodilla izquierda que lo marginó de la última gira por Rusia en la que enfrentó al seleccionado local (1-0) y Nigeria (2-4), y con Mauro Icardi, que se automarginó de ese mismo evento acusando una lesión relativamente parecida.
Sin embargo, Sampaoli no irá a ver en acción a Icardi en el Inter, pero sí a Biglia en el Milan, que el domingo 28 estará enfrentando a su ex club, Lazio, en el estadio San Siro.
Y desde la “capital de la moda” partirá raudamente hacia Francia para presenciar al día siguiente el cotejo que en la capital del país jugarán París Saint Germain y Montpellier, donde verá primero en acción y después en un mano a mano, a los tres jugadores que actúan en el rival de Real Madrid en los octavos de final de la Champions League: Ángel Di María, Javier Pastore y Giovanni Lo Celso.
Ese será el final de la gira. Después será la hora de macerar esta selección para llevar el “mejor vino” a Rusia y servirlo en la Copa del Mundo.