Con sus propias palabras, la flamante soberana de La Paz se presenta ante Mendoza: “Soy Romina Gurlino, tengo 19 años, represento al departamento de La Paz y estudio la tecnicatura en radiología, en Ciudad. Me defino como una persona muy sociable y siempre el que me necesite va a encontrar en mí alguien que lo escuche y que lo apoye”.
Además, Romina -mientras posa con mucha naturalidad para la producción fotográfica de Los Andes- confiesa que si bien dedica mucho tiempo al estudio, le gusta disfrutar al máximo de su familia. Jugar al básquet y escuchar música son dos de los pasatiempos que más le divierten.
Con respecto a Vendimia, esta bella soberana del departamento del Este mendocino dice que sintió una alegría muy grande cuando le propusieron ser candidata por el Centro cultural y recreativo La Paz.
“Siempre me gustó todo lo que significa Vendimia. Por eso, cuando me buscaron me puse muy contenta. Ya me habían convocado en 2012, pero ese año di prioridad a mis estudios. Esta vez, no me lo perdía por nada del mundo”, rememora.
Feliz con todos los días que está viviendo, Romina siente que ha formado una muy linda amistad con las candidatas con quienes compitió por el trono departamental y se siente muy conforme con todo el apoyo brindado por el municipio.
El momento de la elección fue clave para ella: “Apenas fui electa, no caía. Fue un momento de mucha emoción, de mucha felicidad. Ver en ese instante a mi familia fue muy lindo, igual que cuando me di vuelta y vi a toda la gente que me estuvo apoyando desde siempre”.
Es esa inmensa felicidad la que la hace vivir cada instante a pleno. Romina no proyecta, no sueña con el día del Acto Central. Sólo lo aguarda ansiosa, expectante. Es que nunca tuvo la posibilidad de presenciar esta gran fiesta. Por eso, espera paciente “para disfrutarlo y divertirse”, según sus propias palabras.
Mientras espera la gran noche de Vendimia, la esbelta y delgada paceña ya planifica sus horas como Reina de La Paz. “Me gustaría dedicarme a los temas concernientes a la salud. Mi carrera está muy vinculada y en el hospital se necesita mucha ayuda. También me gustaría dedicarme más al turismo. Si bien es un departamento chico y donde el turismo no está muy desarrollado, La Paz es un lugar para el encuentro y se destaca mucho la calidad y calidez de su gente”, asegura.
Pero también tiene planes a nivel personal y con objetivos muy claros. Sabe que el día que se reciba quiere volver a su departamento y volcar sus estudios y conocimientos allí, en su lugar. “Mi idea es devolver un poco todo lo que el departamento me dio”, afirma y agrega: “Me veo viviendo en La Paz. Es un departamento con muchas cualidades. Yo vengo a la ciudad, estudio y me pego la vuelta. Se extraña mucho y siempre tengo ganas de volver”.
En lo mejor de su juventud, Romina tiene un gran camino recorrido: es Reina departamental, estudia una carrera terciaria y hace lo que le gusta. ¿Si le quedan puntos pendientes? Ella responde: “El modelaje me gusta. Siempre participo de desfiles en mi departamento. Pero de ahí no he salido ni lo he tomado de manera profesional. Pero no lo descarto”, sostiene. Si bien siempre elegirá La Paz para vivir, sueña con trabajar como modelo fuera de la provincia y, por qué no, llegar a Tinelli. “No me da miedo la fama ni la exposición”, dice.
Antes de terminar su sesión de fotos, Romina hace una invitación: “A los mendocinos y turistas que nos visitan quiero invitarlos a vivir Vendimia y disfrutar nuestra fiesta y nuestra provincia”.