Al ex camarista federal Otilio Romano se le cerraron los caminos judiciales de apelación y será extraditado a la Argentina, según resolvió ayer la Corte Suprema de Chile.
La Sala Penal de la Corte trasandina resolvió hacer lugar al pedido de extradición del Estado Argentino y el ex magistrado, que está acusado de amparar delitos de lesa humanidad durante la última dictadura, deberá ser puesto a disposición de la justicia argentina en territorio nacional.
El fallo, de carácter unánime, fue adoptado por los cuatro jueces de la Segunda Sala.
"La Corte Suprema confirmó la resolución del ministro instructor (juez) Sergio Muñoz Gajardo, que concedió la extradición a Argentina de Otilio Romano Ruiz por causas por violaciones a los derechos humanos ocurridas en el régimen militar trasandino", informó el Poder Judicial en un comunicado.
Según contó Pablo Salinas, abogado defensor de los derechos humanas en Mendoza y apoderado legal del Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos (MEDH), ahora la Cancillería de Chile tiene un plazo de 30 días para organizar el operativo de traslado.
Salinas destacó el papel que jugó el abogado chileno Carlos Quesada, que es quien tiene el poder de las víctimas demandantes y del mismo Salinas del lado chileno.
Un día antes de su destitución, el 24 de agosto de 2011, Romano huyó a Chile, donde buscó el asilo político, que nunca le fue otorgado.
Cabe recordar que el ex juez fue destituido tras ser acusado de "partícipe primario" en 103 casos de violaciones de los derechos humanos durante el último régimen militar, cuando se desempeñó como fiscal federal de Mendoza.
También es destacable el papel de la fiscal que llevó la causa del lado chileno, Mónica Maldonado, quien analizó las imputaciones y dedujo que existían méritos suficientes para presumir la complicidad del ex juez federal mendocino con la dictadura.
Según el tribunal supremo de Chile, la resolución concede la extradición por amparar "34 delitos de privación ilegítima de libertad, con desaparición forzada de personas; 26 delitos de privaciones ilegítimas de libertad; 36 delitos de tortura, un delito de allanamiento ilegal y un delito de denegación de justicia, de acuerdo al artículo 274 del Código Penal argentino".
Hoy, Romano se mantiene bajo arresto domiciliario nocturno en una casa del balneario de Reñaca, en Viña del Mar, desde donde deberá ser trasladado a la frontera.
Según el abogado Salinas, en la mente de las víctimas de delitos de lesa humanidad de la provincia está la esperanza de que Romano pueda llegar a Mendoza en los próximos 10 días y que de esta manera pueda ser juzgado en el nuevo juicio contra represores que se desarrollará en la provincia en noviembre próximo.
