Unos 42 imputados por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura cívico- militar, entre los que se encuentran los ex jueces
Otilio Romano
y
Luis Miret
, serán juzgados a partir del 17 de febero próximo por el Tribunal Oral Federal N° 1 de Mendoza.
Según se informó desde la secretaría de Derechos Humanos de la Justicia Federal, esta megacausa "empezará el 17 de febrero y
, para lo cual hay unos 467 testigos iniciales".
Sin embargo, se aclaró que "esta lista aún no es definitiva, dado que hay muchos testigos que ya han declarado o pueden haber fallecido".
Un juicio con muchos testimonios "que concentrará quince causas radicadas sin debate oral, más una sumada recientemente del tribunal federal dos de esta capital pero que comparte el mismo estado procesal", indicaron desde el juzgado.
En principio hay 42 imputados, aunque faltan informes del cuerpo médico forense, para lo cual habrá que esperar a los primeros días de febrero para conocer la lista definitiva.
Entre los acusados estaría
Enrique Gómez Saa
, ex integrante de la VIII Brigada de Infantería de Montaña, cuyo juicio tendría que haber comenzado el pasado 11 de noviembre, pero se suspendió porque el represor se encuentra internado en el Hospital Español por un accidente que le provocó debilidad en los miembros inferiores y síndrome de confusión.
En este marco, el destituído juez Romano está acusado de haber sido partícipe primario en 103 delitos de lesa humanidad, mientras que Miret está acusado de más de 30 hechos, ambos por omitir investigar delitos como privaciones ilegítimas de la libertad, desapariciones, robos y torturas.
Junto a ellos también estarán los ex jueces
Rolando Evaristo Carrizo, Guillermo Max Petra Recabarren
y
Gabriel Guzzo.
La Cámara de Apelaciones conformada por Romano, Miret y Petra tuvo un rol importante en democracia, cuando se comenzó a investigar las denuncias de los familiares y de las víctimas de delitos de lesa humanidad, al aceptar los pedidos de excarcelación de los ex funcionarios militares y policiales con los que compartirán el banquillo de los acusados.
El juicio es muy esperado por los organismos de derechos humanos, sobre todo desde que el ex juez Romano fue extraditado desde Chile este año, adonde se había fugado poco antes de ser suspendido de su rol como magistrado en la Justicia Federal.