El partido antisistema Movimiento Cinco Estrellas (M5S) logró un resultado histórico en Roma, donde su candidata fue la más votada en la primera vuelta de las municipales, una advertencia para el gobierno de Matteo Renzi.
Virginia Raggi, la candidata del M5S, obtuvo 35,37% de los votos, según resultados casi definitivos, y se enfrentará el 19 de junio, en la segunda vuelta, a Roberto Giachetti, el candidato del Partido Demócrata (PD, centroizquierda) de Renzi, que sólo obtuvo un 24,80%.
Esta abogada de 37 años era la favorita según las encuestas, pero no se esperaba que lograra tan buen resultado.
En la segunda vuelta, Giachetti aspira a recuperar los votos de un partido de centroderecha que forma parte del gobierno.
Pero probablemente sean insuficientes para enfrentarse a Raggi, que por su parte podría contar con una parte de los electores de Giorgia Meloni, la candidata de la Liga Norte, un partido populista y xenófobo, que quedó tercero con más del 20% de los sufragios.
“Nunca votaré por un candidato del PD (...) ni que me torturen. En caso de segunda vuelta Giachetti-Raggi, votaré por Raggi”, había dicho antes de las elecciones Matteo Salvini, el líder de la Liga Norte.
Raggi por su parte ya se felicitó el domingo de los “vientos de cambio” en la capital italiana.
Para Renzi, que en octubre se juega su futuro político en un referéndum constitucional, la derrota en Roma se suma a la de Nápoles, donde la candidata de su partido ni siquiera se calificó para la segunda vuelta. “Estoy insatisfecho”, admitió el lunes.
En cambio en ciudades como Milán, Turín o Boloña los candidatos del PD quedaron en cabeza y tiene posibilidades de ganar.