En el marco del Ciclo de Encuentros organizado por Los Andes, el oftalmólogo Roger Zaldívar accedió a una entrevista que cierra el segmento sobre temas de Salud. En esta charla destacó la importancia de la educación para prevenir patologías visuales, la cual debe estar enfocada fundamentalmente en los niños.
-¿Cuáles son las patologías visuales por las que más se consulta o sobre las cuales han notado un incremento?
-Lo que se ve en aumento es la patología de superficie ocular, que en Mendoza es común. El ojo seco es muy difícil de abordar por que hay una disociación entre signo y síntomas: uno a veces ve el ojo y no tiene nada pero el paciente siente sequedad. La lágrima es clave en la provincia por la sequedad del ambiente; parpadeamos menos por las computadoras y porque vivimos a full. Hay tratamientos nuevos para esto que están dando muy buenos resultados. Lo otro que se está viendo mucho es la miopía: hay una pandemia de miopía porque ha aumentado muchísimo la cantidad de personas miopes. Esto es una adaptación del ojo al medio en el que vive, en el que tiene que estar haciendo foco todo el tiempo de cerca. Los tejidos están amoldándose al medio.
-¿La miopía puede surgir a cualquier edad?
-Sí. Según las publicaciones, para 2050 más de la mitad de la población mundial será miope. Hay datos que indican que hasta 37% de la población es miope (aunque no hay números locales). Donde más afecta es en zonas urbanas. En el este de Asia, en zonas urbanas, la prevalencia es de 80 a 90% de la población y la mitad de los europeos de entre 25 y 35 años. La miopía es progresiva: lo normal es que aumente de grandes, pero aumenta en niños porque son los grandes consumidores de pantallas.
-Justamente por eso los chicos salen cada vez menos al exterior y usan menos la vista para mirar grandes distancias...
-Hace 20 o 30 años lo normal era salir a correr en el recreo, volvías a tu casa y te ibas a jugar al fútbol. Cambian los hábitos y el cuerpo humano se está modificando para adaptarse a estos nuevos tiempos. Hay que volver a hacer deportes. No se puede estar leyendo y después salir y seguir haciendo foco en una pantalla porque estamos fomentando una miopía. Cuando es baja no trae complicaciones, pero cuando es alta conlleva una alteración anatómica del ojo por lo que la retina estará más estirada, entonces hay más riesgo de tener desgarro de retina o problemas en la mácula.
-¿Cuáles son las características de la miopía y cómo se da cuenta la gente que consulta de que algo no anda bien?
-Empiezan a notar que se ve más borroso de lejos. La miopía es que el ojo sea más fuerte de lo normal. Se ve como una lupa, lo cual está buenísmo para ver de cerca. Esto se exacerba de noche porque la pupila se agranda. Generalmente los pacientes vienen porque les cuesta ver de lejos o les molesta la luz.
-¿Puede revertirse la miopía?
-No, en ningún caso, se trata con corrección óptica. No hay forma natural de debilitar el ojo, sí quirúrgica.
-¿Cuál es la patología del ojo que más afecta hoy a los niños?
-La miopía, es la que arrasa con todo.
-¿Cuáles son los principales desafíos que tiene actualmente la oftalmología?
-Principalmente trabajar en prevención -como lo está haciendo- para no tener que tratar. Hoy hay muchas cirugías que podrían evitarse penetrando la sociedad con educación. El 80% de los tratamientos que hacemos los podríamos haber evitado. Gran parte de quienes tienen discapacidad visual pierden productividad y terminan comprometiendo incluso a su familia, algo que se podría haber evitado. Si se hacen los controles anuales y se detecta a tiempo una patología ocular, mucho se puede evitar. El control anual lo hace muy poca gente educada. Imaginate en otros sectores. Por eso hay que trabajar en la escuela; tiene que ser un mini hospital y tiene que haber una materia de educación sanitaria.
-¿Recordás alguna anécdota que te haya marcado particularmente como oftalmólogo?
-Arranqué muy joven y fui al choque directo. La primera charla que di (porque yo me crié viendo a mi viejo y a mi abuelo dar charlas) fue con 26 años y sin ser oftalmólogo. Fue para Carl Zeiss (una empresa mundial líder en productos ópticos) en Alemania sobre un tema que yo había estudiado mucho y frente a expertos, tipos muy conocidos. La verdad es que fue muy interesante. La gente me miraba como diciendo “¿qué hace este chico acá?” La verdad es que fue muy estresante para mí pero salió bien y fue un golpe de confianza. Entonces dije: “Voy a hacer mi propio camino”, y de hecho lo hice: con otro enfoque, con un estilo diferente al de mi padre en muchas cosas. Hoy asesoro a más compañías que mi viejo.
Perfil
Roger Zaldívar tiene 33 años y es la tercera generación de una familia de reconocidos profesionales dedicados a la especialidad.
Su abuelo, Roger, y su padre, Robert, son reconocidos a nivel mundial.
Es hincha de Independiente Rivadavia y de Independiente de Avellaneda. Ex jugador de rugby, fue Pumita en 2003.
Estudió Medicina en la Universidad de Mendoza y realizó un fellow en Óptica en la Universidad de Arizona, Estados Unidos.
