De la mano de Ernests Gulbis llegó el primer gran batacazo en el cuadro masculino de Roland Garros. En un Philippe Chatrier colmado, el letón, número 17 del mundo, superó al suizo Roger Federer, cuarto preclasificado, quien por primera vez en diez años se despidió del Abierto francés antes de los cuartos de final. Gulbis se impuso por 6-7 (5-7), 7-6 (7-3), 6-2, 4-6 y 6-3 en un partido muy intenso y se ganó un lugar entre los ocho mejores del segundo Grand Slam del año.
El juego fue muy parejo desde el primero al último game. Gulbis mostró un nivel muy alto. Estuvo imparable con su servicio (metió 13 aces) y arriesgó con su derecha y su revés, jugando a las líneas cada vez que pudo. Encima, la suerte estuvo de su lado, porque varias pelotas que otras veces van afuera fueron buenas por milímetros.
Federer, en tanto, no tuvo su mejor tarde y erró mucho más que de costumbre (terminó con 59 errores no forzados). Pero impuso su jerarquía y su experiencia y con el empuje de la gente, que tenía un claro favorito (en más de una vez el aire se llenó de silbidos y abucheos para el letón), logró mantener la expectativa hasta el final.
Con dos sets para cada uno, llegaron al quinto para definir y Gulbis no dudó. Mantuvo la misma intensidad y la potencia en su juego que en los primeros games y logró quebrar el servicio del ex número uno en el segundo juego para adelantarse 2-0.
A esa altura del partido, a fuerza de buen juego y entrega, el letón había conseguido convertir los silbidos de la gente en aplausos (salvo a algunos que no se resignaban a perder a Roger tan pronto). Aún con la desventaja en el marcador, Federer no dejó de luchar, pero ayer, Gulbis fue demasiado para él. Y en la primera chance que tuvo, selló el resultado y se metió en la siguiente ronda.
Es la primera vez desde 2004 -cuando cayó en tercera ronda ante el brasileño Gustavo Kuerten- que el suizo se fue de Roland Garros antes de los cuartos de final. Y es el primer partido que Roger pierde en cinco sets sobre el polvo de ladrillo de París (tenía un récord de 6-0). En tanto, Gulbis, que sumó el quinto triunfo de su carrera ante un Top 5, irá ahora por el pase a semifinales ante el checo Tomas Berdych, que venció por un triple 6-4 al estadounidense John Isner.
Por otro lado, en la Suzanne Lenglen, Andy Murray tuvo que trabajar para avanzar a los octavos de final de Roland Garros, al imponerse en un dramático quinto set -que no llegó a igualar la duración del que disputaron Facundo Bagnis y Julien Benneteau en la primera ronda, pero que estuvo cerca- ante el alemán Philipp Kohlschreiber. El escocés, séptimo favorito, ganó 3-6, 6-3, 6-3, 4-6 y 12-10 y se metió entre los 16 mejores del torneo por quinta vez en su carrera.
