“El fútbol siempre da revancha”. Sea quien fuere el autor de esta frase, al Monterrey le cabe como anillo al dedo. Es que el equipo donde milita el mendocino Rogelio Funes Mori se quedó con la Copa México, a pocos días de haber perdido otra final, la del Apertura azteca en manos de su clásico rival: Tigres.
Pero lo lindo que tiene este deporte es que siempre hay oportunidades de poder festejar. Y para Rayados se dio en la noche del jueves tras vencer a Pachuca por la mínima diferencia, con un solitario gol de Avilés Hurtado, quien fue asistido por el colombiano Dorban Pavón, aquel mismo atacante que supo amargar al Godoy Cruz en la Copa Libertadores, cuando militaba en Atlético Nacional de Medellín.
Y la historia no fue sencilla para el equipo de Antonio Mohamed. Llegaba con la cabeza gacha apenas 11 días después de haber perdido la final de liga ante los Tigres. Parecía un golpe difícil de asimilar porque se trataba de un título y en un derby. Pero Rayados buscaba ponerle fin a una serie negativa de definiciones perdida que incluía también la del Clausura 2016, justamente ante los Tuzos de Pachuca.
Se trabajó en lo anímico, el Turco logró levantar a sus jugadores y de esa manera su equipo logró quedarse con su segunda Copa doméstica: la anterior la consiguieron en la temporada 1991-92. Para el DT argentino, se trata de su tercer título en el fútbol mexicano, antes ganó las ligas del Apertura 2012 con el Tijuana y del Apertura 2014 con América.
En esta definición copera Funes Mori no se vistió de goleador, pero sí en las fases previas fue determinante, como por ejemplo cuando marcó tres de los cuatro goles ante Morelia para que Monterrey se metiera en la gran final. El joven que fue muchas veces criticado en el ambiente del fútbol argentino, encontró en el país azteca su lugar en el mundo.
Es que tampoco la pasó bien en Portugal cuando Benfica adquirió su ficha y solamente el delantero fue tenido en cuenta en un puñado de partido. Pero su paso por el Eskisehirspor lo hizo renacer futbolísticamente.
En la liga Turca este mendocino que desde muy chico se fue de nuestro pago a probar suerte en Estados Unidos y posteriormente en River, le fue bastante bien y convirtió 14 goles en 36 encuentros. Su desafío era estar en una liga más competitiva y más cerca de sus raíces.
Apareció Monterrey y no dudó en arribar a México. Su aspiración siempre fue la de jugar al fútbol. Junto con su hermano (Ramiro, defensor de Everton de Inglaterra y de la Selección argentina) participaron en el reality show “Sueño MLS”. Entre los 2.000 participantes, los dos quedaron entre los cinco finalistas.
Ganó Rogelio. El premio era llegar al FC Dallas, en donde estuvieron en las categorías menores. Pasó por el básquetbol, pero se tenía fe en jugar en el club de sus amores junto a su mellizo. Y juntos lo consiguieron, en 2009 River Plate les dio la oportunidad y ambos empezaron a demostrar que podían jugar en la primera del Millo.
Y de ahí, a este presente ganador en México, donde es uno de los baluartes de Monterrey. El Melli está en la historia del club y es muy querido por la afición. Y no es para menos, porque quedará siempre en la historia de la institución al haber sido el jugador que anotó el primer gol de su club en el nuevo Estadio BBVA Bancomer, la nueva casa de su equipo.
Decisivo en liguillas. Desde que llegó a las filas del Monterrey, para el Torneo Apertura 2015, Rogelio Gabriel Funes Mori ha disputado 12 encuentros en liguillas y ha marcado un total de ocho tantos, para un espectacular promedio de un gol cada 128.5 minutos. El Mellizo tuvo una espectacular actuación en la fiesta grande del Apertura 2017, pues en tan solamente cuatro partidos consiguió marcar seis goles, convirtiéndose en el elemento más trascendente de Rayados.
Una campaña que volvió a posicionarlo
Durante el segundo semestre del año, Rogelio Funes Mori alternó buenas y malas, pero en los últimos dos meses recuperó su mejor forma futbolística y demostró que no le pesó la responsabilidad de ser el hombre gol del Monterrey, donde comparte equipo con otros compatriotas: José María Basanta (ex Estudiantes de la Plata y Olimpo de Bahía Blanca), Juan Pablo Carrizo (ex River) y Leonel Vangioni (ex Newell’s Old Boys y River).
En cuanto a números específicos en la campaña, Rogelio jugó 1154 minutos por la Liga Mexicana. Titularizó en 14 partidos, en los cuales marcó seis goles y repartió cuatro asistencias. En la Copa México, donde se consagró campeón, fue de la partida en siete ocasiones, anotando seis goles en 436’. Mientras que en la Liguilla del Apertura, jugó durante 510’ también anotó seis conquistas y se vistió de asistidor dos veces.
