Los buenos resultados de la última vendimia le brindan al sector exportador de jugo concentrado de uva la posibilidad de duplicar las exportaciones de 2017.
Desde la Cámara Argentina de Fabricantes y Exportadores de Mosto solicitaron que los nuevos aranceles y retenciones se apliquen sólo hasta el promedio de exportaciones de los últimos tres años. El gerente de la entidad, Rodolfo Paolucci, sostiene que las perspectivas son alentadoras.
-¿Cómo ha sido la producción este año?
-En 2016 y 2017, la vitivinicultura tuvo la peor cosecha de los últimos 25 años. Y eso a nosotros nos impactó bajándonos la cantidad de materia prima. Este año, gracias a que se superaron las expectativas del Instituto Nacional de Vitivinicultura en más de un 15%, pudimos acceder a bastante materia prima, lo que nos permite tratar de recuperar el mercado perdido. Para tener una idea, en 2017 se exportaron alrededor 70 mil toneladas de sulfitado y este año hay expectativas de que vamos a duplicar esa cantidad vendida en el exterior.
-¿Han mejorado las posibilidades de competir en el mercado internacional con la devaluación?
-La devaluación para el sector exportador es sumamente conveniente. Permitió cierta holgura para ser competitivos en precios, por lo que no todo pasó directamente a la ganancia de las mosteras. Pero también tenemos una cuestión de impacto fiscal. En los últimos 15 días apareció nuevamente el derecho de exportación, que entendemos por qué se aplica, para lograr un equilibrio fiscal, pero significa prácticamente un 10% del valor de la tonelada.
Si a eso se le suma que unos 30 días atrás nos comunicaron que el reintegro pasó de 5% a 3,25%, también ahí tenemos menos beneficios. El escenario es bueno en cuanto a la colocación de productos, pero la situación se complicó con esta nueva presión fiscal. Además, todavía no sabemos cuál va a ser el precio de los sustitutos y parece que las cosechas de Estados Unidos, Francia y España van a ser buenas. Esto nos obliga a ser lo más competitivos posible.
-¿Cómo están los precios en el exterior?
-Cuando arrancamos la temporada tenemos una ventana interesante para ofrecer nuestros productos porque todavía no está la información de la cosecha del hemisferio norte (California, España, Francia), podemos tratar de conseguir un precio mayor. Obviamente había otro dólar en ese momento, pero estábamos pretendiendo US$ 1.400 a US$ 1.500 por tonelada de sulfitado.
Pero se hizo muy difícil colocarlo en estos niveles y el mercado se fue acomodando a la baja. Hoy estaríamos en un promedio de puesta en planta, a lo que habría que sumarle los gastos de transporte y logística, de entre US$ 1.000 y US$ 1.100 la tonelada de granel.
-¿Por qué se produjo esa disminución?
-Porque tenemos esa ventana de oportunidad pero después van apareciendo las especulaciones sobre la cosecha y los oferentes. Desde hace unos años hay un sustituto, que es la manzana, y China es uno de los principales exportadores, con una escala tan importante que logra costos muy competitivos y ofrece precios con los que al mosto le cuesta competir. España también tiene una posibilidad de competencia bastante fuerte y ha acaparado el mercado de la Comunidad Europea.
Entonces tanto China como España, cada uno con su perfil de producto, llegan internacionalmente con acuerdos comerciales fantásticos, libres de impuestos. Excepto este año, que Estados Unidos está haciendo un cierre a los productos chinos con aranceles bastante altos. Y en eso vemos la posibilidad de poder competir más de cerca con la manzana en el mercado norteamericano.
-¿Que podría hacer que esta situación sea más favorable para el sector?
-La última reunión de competitividad, de las que participa la Coviar (Corporación Vitivinícola Argentina), entidad de la que somos parte, fue en Mendoza y estuvo presente el presidente Mauricio Macri.
El presidente de la cámara (Fernando Morales) propuso que los excedentes mayores al promedio de los últimos tres años vuelvan a tener el mismo tratamiento fiscal que tenía al comienzo, con el reintegro del 5% y sin derecho de exportación. La media rondaría las 80 mil toneladas y este año hay perspectivas de exportar 120 mil. Esto no le pareció mal al gobierno porque de alguna manera la presión fiscal sobre la economía regional no es lo que quiere.
Perfil
Desde febrero, Rodolfo Paolucci es gerente de la Cámara Argentina de Fabricantes y Exportadores de Mosto, entidad que actualmente cuenta con 9 asociados. También se desempeña como gerente financiero en Bodega Alta Vista.
Es contador público, egresado de la UNCuyo, y por más de 25 años ha trabajado como asesor en gestión y finanzas en el rubro vitivinícola.
