Aun con un resultado que es prácticamente la mitad de lo que esperaba conseguir, Matías Roby se mostró optimista sobre su futuro. El tándem Roby- Pringles logró 5%. Sin imponerse como el candidato del Frente para la Victoria (FpV), y en un cómodo tercer lugar, Roby aseguró que se va poner a disposición de Adolfo Bermejo para que la próxima persona en ocupar el sillón de San Martín sea de PJ.
Utilizando la máxima del peronismo: “El que gana conduce, el que pierde acompaña”, el ex ministro de Salud reconoció en el Salón Báltico de Guaymallén su derrota, aunque afirmó que no iría por la foto de la unidad al búnker de Bermejo, ya que no le interesaba mostrarse con Francisco Pérez o Carlos Ciurca.
Sin confirmar ni descartar de plano una posible candidatura, se refirió claramente a un futuro político en donde “voy a jugar fuerte. La intendencia de Godoy Cruz es un tema que vamos a hablar a partir de mañana con cada uno de los que hacemos Juntos Podemos y decidiremos lo que sea mejor para el espacio”.
Estimó que cualquier candidatura posible será dentro del peronismo, “no saco los pies del plato. Voy a seguir jugando dentro del peronismo porque tengo genética peronista, más allá de que nunca me haya afiliado, pero no me voy, mucho menos después de lo que pasó”.
Las excusas de la derrota
Tras su renuncia al ministerio de Salud, en varias charlas con periodistas, Roby afirmó que tenía como mínimo un piso de 15 puntos con lo cual de ahí empezaría a construir su candidatura.
Para Roby, entre ese guarismo y el que realmente consiguió el resultado fue consecuencia de la falta de apoyo del partido.
“A nosotros desde el peronismo no nos ayudaron y además nos boicotearon todo lo posible”, sentenció. Agregó: “Es muy importante saber con qué estructura partidaria uno cuenta, porque son ellos quienes te cuidan los votos, quienes reponen las boletas cuando faltan y todo esto requiere de recursos que nosotros no tenemos. Hemos tenido mucha voluntad y vocación pero realmente muy pocos recursos.
Mañana, cuando veamos las cifras cerradas, se van a dar cuenta que hemos sacado más porcentaje que muchos partidos tradicionales de Mendoza, ahí vamos a ver la fuerza que hemos construido”.
En clara referencia al magro presupuesto con el que contó, Roby señaló: “Gastamos $ 1,3 millón, mientras que espacios como Frente Cambia Mendoza gastó mucho más de 20 millones de pesos. Y si miramos en el peronismo, Guillermo Carmona recibió fondos nacionales por arriba de los 20 millones de pesos, a lo que sumó la visita de cinco referentes nacionales con rango ministerial”.
El candidato traicionado
Roby volvió nuevamente sobre su ruidosa salida del Ministerio de Salud y puso sobre el tapete la pelea que mantiene con Francisco Pérez, sobre quien aseguró que no tiene posibilidades de imponerse como candidato a diputado nacional en las próximas elecciones.
“Paco me pidió que yo fuera a hablar con Mario Riorda. Habló él con quien era el ministro de Salud de la Nación, Juan Luis Manzur. Además le dijo a gente de los medios que me apoyaran porque era su candidato. Luego, tras las negociaciones internas, debió negociarme y cambiarme por sus apetencias personales por la diputación nacional”, recordó sobre su frustrada posibilidad de ser el candidato ungido por el Gobernador.
Roby sostuvo que desde su perspectiva, “va a ser difícil que Paco consiga la candidatura; si se le da mejor para él, pero no creo que esto pase. La relación con Paco cambió, ya no hay vínculo, cuando negociás la historia, para mí es imposible que las cosas vuelvan a ser como eran”.
El ex ministro dijo sobre su futuro cercano que seguirá trabajando en el Centro Médico de Palmares y en el club Godoy Cruz. Además afirmó que va a ir por el decanato de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Mendoza.