París. Un comando de 15 ladrones asaltó en la medianoche del martes dos vehículos de transporte de caudales en una autopista a unos 200 kilómetros de París, y se llevó un botín en joyas de unos 9 millones de euros, indicaron ayer fuentes judiciales.
El espectacular asalto tuvo lugar en la autopista A6, en el sentido de París-Lyon, a la altura del peaje de Avallon, situado a unos 200 kilómetros al sudeste de la capital francesa. Fue perpetrado por individuos encapuchados y fuertemente armados, según la policía.
La fiscalía de Auxerre, a 50 km al sur de Avallon, confirmó el asalto y dijo que no hubo víctimas. Los conductores de los dos camiones quedaron ilesos en el lugar mientras los ladrones escapaban en cuatro automóviles, además de los dos furgones conducidos por dos de ellos.
La Policía y la Gendarmería, con la ayuda de helicópteros, pusieron en marcha un importante dispositivo para dar con los asaltantes.
Los furgones, que transportaban joyas para una venta prevista en Besançon (este), fueron hallados calcinados en un campo, cerca del peaje.
“Se trata probablemente de tipos con una amplia experiencia en el bandolerismo y bien informados. No hubo disparos y todo se desarrolló en un tiempo relámpago”, afirmó una fuente policial.
Este robo sería el más importante a un transporte de caudales desde el ocurrido en 2009, cuando un guardia de seguridad, Tony Musulin, aprovechó una parada en Lyon para desaparecer con su furgoneta mientras sus compañeros estaban fuera, llevándose 11,5 millones de euros.
Más tarde se entregó a la policía y fue condenado a una pena de más de cuatro años de prisión. Las autoridades buscaban ayer a los ladrones en la región de Yonne, y los alrededores de esa zona en Borgoña, al sureste de París.
Otros golpes espectaculares
En los últimos años se han producido otros grandes robos de joyas en Francia.
El pasado noviembre, dos hombres armados robaron una joyería de Cartier en un barrio turístico de París, huyeron de la policía en una persecución por el río Sena, tomaron un rehén y después se rindieron.
En 2013 se produjeron dos robos de alto nivel durante el Festival de Cine de Cannes. En el primer golpe, un hombre armado entró en una joyería del Hotel Internacional Carlton, se hizo con un botín valorado en 136 millones de dólares y desapareció por una calle lateral.
Después, dos hombres armados se fugaron con una bolsa de relojes de lujo en la misma calle.
Ocho personas fueron condenadas el mes pasado en relación con uno de los robos de joyas más espectaculares de la historia reciente de Francia, cometido en una tienda de Harry Winston en París. En esa ocasión, tres hombres armados que iban vestidos de mujer robaron artículos por valor de unos 92 millones de dólares.