A fines de 2014 Rivadavia puso en la calle media docena de móviles preventores, para colaborar con la seguridad del departamento. El objetivo de ese equipo mixto, de empleados municipales y policías, fue reforzar el control de comercios, las salidas bancarias y los operativos de alcoholemia, entre otras actividades.
Sin embargo, en el último tiempo solo la mitad de estos vehículos sale a la calle y aunque hay uno más en depósito, el resto fue destinado a otras tareas. Desde la comuna aseguran que la emergencia en seguridad que decretó el departamento en 2014 “quedó superada” y que junto con la policía, acordaron reducir el número de móviles preventores.
El proyecto de la comuna para sacar a la calle un equipo municipal de seguridad comenzó a tomar forma en agosto de 2014, cuando el municipio declaró la emergencia en esa materia, luego de una serie de casos policiales resonantes y de la queja de los vecinos que salieron a protestar más de una vez.
Para colmo, a mediados de 2015, la comisaría 13 de Rivadavia se quedó sin móviles policiales durante casi dos meses y la tarea de patrullaje quedó reducida en aquel momento, al equipo de preventores que de todos modos, nunca tuvo autorización para entrar en zonas conflictivas o en la represión directa del crimen.
“Fueron tiempos complicados pero hoy la situación es otra, la comisaría tiene movilidad suficiente y acordamos que ya no son necesarios todos los vehículos con que comenzó a operar este cuerpo”, señalaron desde la comuna y subrayaron: “Es cierto que se redujo la cantidad de preventores, pero fue parte de un acuerdo con la policía”.
"No estoy de acuerdo: quitar vehículos a la seguridad, aunque sean municipales, es dar un paso atrás", opinó Silvia, vecina de la ciudad del este provincial.
Inicialmente, el equipo que salió a fines de diciembre de 2014 estuvo integrado por seis vehículos, 25 choferes municipales y 18 policías, personal suficiente para armar tres turnos y patrullar durante las 24 horas. Entre las tareas habituales que desarrollaron en estos años estuvo el control de comercios, las salidas bancarias, los operativos de alcoholemia, el ingreso y salida de las escuelas, las citaciones judiciales y el auxilio en los accidentes viales.
El secretario de Gobierno, Hernán Amat aseguró que la decisión de reducir el número de preventores municipales, "fue una idea que se acordó con la policía. Hoy hay más móviles policiales y la comisaría no tiene suficiente personal para nuestros autos".
Según datos oficiales, Rivadavia cuenta con dos móviles en la comisaría 13: otros cinco móviles, dos motos y cuatro bicicletas en la Unidad Especial de Patrullaje; una camioneta policial en Reducción; otras dos en Medrano, además de una moto y dos bicicletas en ese mismo distrito. "Más allá de todo eso, nuestro equipo sigue funcionando, hay tres vehículos de preventores, más un cuarto de reemplazo", explicó Amat y señaló que el resto fue destinados a Inspección y Obras Privadas.
Con toda esa movilidad a disposición de la policía de Rivadavia, el escenario dista mucho del amargo panorama que mostraba el departamento en 2014 y 2015, cuando por escasez de elementos de seguridad, la comuna decidió declarar la emergencia y sacar a la calle su propio cuerpo de preventores. Sin embargo y aunque la situación es hoy sensiblemente mejor, muchos vecinos coinciden en la necesidad de mantener los recursos para seguridad que ya se consiguieron: "No estoy de acuerdo, quitar vehículos a la seguridad, aunque sean municipales, es dar un paso atrás", opinó Silvia, vecina de ciudad.
Algo similar sostiene el ex intendente Ricardo Mansur, que armó el cuerpo de preventores cuando estuvo a cargo de la comuna: "En seguridad, los esfuerzos siempre son pocos y no solo hay que profundizar la limpieza y la iluminación de las calles para colaborar con la policía, sino que en Rivadavia, el equipo de preventores que formamos debería seguir operativo tal cual se diseñó", se quejó Mansur.