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hace 7 horas
Ricardo Manson, el hombre acusado de quemar y provocar la muerte de un perro en Guaymallén, será sometido a juicio oral por violar el artículo 3 de la ley de crueldad animal, un delito que prevé una pena de 15 días a un año de prisión. Así lo determinó el fiscal Tomás Guevara.
Desde que sucedió el hecho, Manson fue escrachado públicamente en su domicilio durante varios días. Luego fue imputado y el lunes de esta semana detenido por no informar sobre su paradero como marcan los procedimientos judiciales. Más tarde, el acusado pagó una fianza de 15 mil pesos y volvió a la libertad.
El hombre había sido declarado "peligroso para sí y para terceros", luego de una pericia solicitada por la Sociedad Mendocina Protectora de Animales y realizada por los médicos especialistas.
Este resultado llevó a exigir que Manson se presentara todos los meses en el hospital psiquiátrico El Sauce y semanalmente en la Justicia.
Pero esto conllevaba cumplir con un domicilio cierto donde el imputado pudiera ser notificado y encontrado, algo que no ocurrió porque el imputado violó esta norma de conducta y desapareció del departamento que habitaba en la calle Azcuénaga del departamento guaymallino. Por eso, se solicitó su detención.
La Policía logró encontrar a Manson el lunes por la mañana y lo trasladó a una dependencia policial en calle Olascoaga.
La acción de la fuerza pública fue requerida la semana pasada por los abogados querellantes de la Sociedad Mendocina Protectora de Animales, Sergio Carreño y Ulises Morales, quienes habían presentado el jueves pasado un escrito ante la Justicia exigiendo que Manson quedara detenido.
El fiscal de instrucción Gonzalo Marzal hizo lugar al pedido y los uniformados lo hallaron y lo aprehendieron.
De todas formas, Manson abonó 15 mil pesos de fianza estipulada por el fiscal y retomó su vida en libertad.
Ahora el caso sumó un nuevo capítulo, ya que Manson será enjuiciado en el Sexto Juzgado Correccional, a cargo de la magistrada Carolina Rivera, por quemar y causar la muerte tras tres días de agonía de "Fénix, Fachita o Fueguito", como lo llamaban los vecinos.
Crueldad extrema
El perrito tenía más del 60% del cuerpo quemado y estaba deshidratado.
"Lamentablemente sufrió un paro y no logró sobrevivir", dijo Eliana Rainieri, la veterinaria que asistió al cachorro tras la agresión.
"Hicimos todo lo posible por reanimarlo, pero perdió mucha piel y fue imposible recuperarlo", se lamentó la mujer, quien agradeció a los vecinos que lo rescataron y colaboraron para que pudiera vivir.
"Los vecinos nos acercaron cremas, analgésicos, aloe vera. Estuvieron siempre cooperando, por eso muchas gracias por la ayuda y sobre todo por denunciar el hecho", contó en su momento la veterinaria Rainieri.
El ataque ocurrió en una vivienda ubicada en calle Azcuénaga al 2.200 de San Francisco del Monte, donde vivía hasta hace algunos días el agresor.
