Desde que al entrenador de hockey Walter Conna le robaron todas sus pertenencias de su camioneta estacionada en un mall de Palmares en setiembre del año pasado y sin haber siquiera forzado las puertas o cerraduras del vehículo, el hombre no abandona la camioneta sin antes revisar puerta por puerta que estén cerradas.
Conna fue víctima de un robo que tuvo su génesis con la entrada en escena de los peligrosos inhibidores de alarmas, un aliado silencioso y discreto; y que desde el año pasado está presente en varios hurtos mendocinos.
Según destacó el director de Investigaciones de la Policía de Mendoza, José Vega, entre 2018 y lo que va de 2019 han detenido al menos a 4 grupos que operan con esta tecnología y luego de hacer detenidos trabajos de seguimiento. A ellos se suman otros tantos procedimientos detectados in fraganti y que ha desarticulado la parte operativa de la dependencia. El viernes pasado detuvieron a un hombre de 37 años que había sustraído minutos antes las pertenencias del interior de un vehículo estacionado en calle Perito Moreno (Godoy Cruz); también por medio de este equipo.
"La recomendación es que el dueño del auto revise personalmente si la puerta se cerró, independientemente de que haya presionado el botón y haya escuchado el ruido de la alarma o haya visto la señal de luces en el auto. Lo que hace el inhibidor es interceptar y bloquear la señal, por lo que nunca se cierra el vehículo ni se activa la alarma", agregó.
Una de las principales preocupaciones es que los inhibidores de frecuencia están a la venta y se pueden conseguir por Internet -los más baratos apenas superan los $ 3.000-.
"Están a la venta, básicamente, porque se utilizan para trabajar en las empresas de alarmas. Por esto mismo va a ser muy difícil la prohibición. El Ministerio de Seguridad de la Nación ya está trabajando en una regulación para encontrarle la vuelta y evitar estos ilícitos", destacó a su turno el ministro de Seguridad de Mendoza, Gianni Venier. Insistió en la recomendación de revisar manualmente que el vehículo esté cerrado; en especial en aquellas playas de estacionamiento de centros comerciales (donde han una gran cantidad de autos y el escenario predilecto por estos delincuentes).
Frecuente
Conna había estacionado su camioneta en la playa de un centro comercial ubicado donde comienza la ruta Panamericana, y recién supo que nunca se activó la alarma ni el cierre centralizado cuando regresó a la playa. "Me interceptaron la señal. Pero cuando apreté el botón, hizo el destello de la luz y todo. Lo que pasa es que nunca se cerró la camioneta", detalló el deportista, quien resaltó que incluso el hecho de que se encendieran las luces cuando creyó activar la alarma lo había dejado tranquilo.
En aquella oportunidad le robaron ropa personal y oficial del equipo -volvía de dirigir en Buenos Aires-, además de una notebook, una tablet, memorias USB y cerca de 20.000 pesos en efectivo. "Hice la denuncia y a la semana detuvieron en un operativo a una banda. Supieron que eran los que me habían robado a mí porque tenía todas las entradas del mundial de hockey que estaban a mi nombre. Pero de mis pertenencias, no pude recuperar nada", destacó Conna
Según detalló; 4 ó 5 días después de que fuera víctima de este delito, detuvieron a la banda también en Palmares cuando estaban repitiendo el modus operandi y gracias a los registros fílmicos de la cámara de seguridad de una farmacia que funciona en el mall.
"No es algo excepcional. Hace unos días, una señora que viene al club me contó que le habían querido robar cosas del auto cuando ella se bajó en una panadería de la calle Mitre (Chacras de Coria), pese a que había apretado el botón del control de la alarma. Ella justo alcanzó a ver que se quería subir el ladrón y no le robaron nada. Y desde que me pasó, reviso todas las puertas cada vez que me bajo y pongo la alarma", repitió el entrenador.
Andrés Vicari es encargado de Nipro X-28 alarmas y destacó que si bien no son muchos los usuarios que han ido a consultar por equipos "anti inhibidores", es una situación que está empezando a registrarse de forma frecuente.
"El inhibidor de frecuencia no hace que se desactive el sistema, sino que directamente bloquea la señal y ésta no llega. Normalmente, las alarmas originales que traen los vehículos de fábrica no hacen ningún sonido. A eso se suma que mucha gente aprieta el botón cuando ya se ha alejado del vehículo y no corrobora si quedó cerrado", destacó el técnico. De esa forma, lo que ocurre cuando opera el inhibidor es que la alarma nunca se activa (pese a que se le dio la orden con el control).
Tal como explica Vicari, lo que hace el inhibidor es tapar la frecuencia de transmisión que emite el control; y lo hace emitiendo (el equipo que tiene el ladrón) una frecuencia más potente aún. "No hemos tenido muchas consultas ni viene mucha gente a mejorar su alarma a raíz de esto. Pero lo recomendable es revisar que haya quedado todo bien cerrado", sintetizó Vicari, en sintonía a las recomendaciones de las autoridades policiales.
Desde Investigaciones indicaron que el año pasado se comenzó a notar un incremento en estos delitos (la mayoría son hurtos simples, ya que el ladrón se lleva lo que hay en el interior del vehículo que nunca tuvo el acceso bloqueado).
"La gente que trabaja con estos sistemas se ubica cerca de los vehículos y está atenta a la gente que estaciona, baja y quiere activar su alarma. En los autos modernos, la alarma trabaja como un cierre centralizado también. Y el peligro de los inhibidores es que -en muchos casos- el ruido como si se hubiese puesto la alarma se hace igual, aunque se ha bloqueado", se explayó Vega, quien también recomendó a los dueños de autos verificar personalmente que hayan quedado cerrados con seguro y alarma.
Y resaltó: "estamos trabajando ya con los desarrolladores de alarmas para superar el problema de los inhibidores. Ese es el nuevo desafío".
Proyecto de regulación
El Ministerio de Seguridad de la Nación se encuentra trabajando en una regulación para limitar el acceso a los inhibidores de frecuencia (hoy los utilizan las mismas empresas de alarmas y por eso su compra no es ilegal).
No obstante, recientemente Seguridad y el Enacom firmaron un convenio que propone su prohibición "a excepción de casos en que por cuestiones de seguridad se requieran".
La resolución conjunta, publicada en el Boletín Oficial, prohíbe "el uso de dispositivos o sistemas de radio que impidan, interrumpan, estorben, entorpezcan o causen interferencias en la interconexión radioeléctrica entre dos o más estaciones (fijas o móviles), imposibilitando el cursado de llamadas, la transferencia de datos u otro tipo de información". No obstante, quedan exceptuados los "dispositivos o sistemas de las fuerzas policiales o de seguridad nacionales o provinciales que sean usados de manera exclusiva para preservar la seguridad pública", según destacaron desde el Enacom a Clarín.