Los detalles del informe forense tras la autopsia a Fernando Báez Sosa revelaron estremecedores datos sobre cómo murió el joven atacado por un grupo de rugbiers a la salida de un boliche en Villa Gesell.
El análisis es contundente: Fernando recibió piñas y patadas tanto en la cabeza como en el abdomen y murió de "un shock neurogénico". Esto significa que murió tras sufrir daños al sistema nervioso a causa de los golpes en el cráneo.
Según informó Clarín, que accedió al documento -entregado el 22 de enero a la fiscal Verónica Zamboni- , se señala que Fernando murió "en forma traumática producto de un paro cardíaco traumático por shock neurogénico producido por múltiples traumatismos de cráneo que generaron hemorragia masiva intracraneana intraparenquimatosa sin fractura ósea".
Los detalles
Según el informe, Fernando recibió una brutal golpiza. La hemorragia intraparenquimatosa constituye la primera causa por hemorragias cerebrales. Aunque no se registran fracturas óseas, el ataque fue dirigido principalmente a la cabeza y el abdomen. También se observaron "múltiples escoriaciones y equimosis en región maxilar y cara lateral de cuello, entre las que se distinguen dos improntas de pie calzado", cuyos resultados se esperan para las próximas horas.
La equimosis implica una lesión vital, o sea que no puede ser post mortem. Báez Sosa las sufrió estando aún con vida sobre la avenida 3 y el Paseo 102. Luego quedó inconsciente, le hicieron maniobras de Reanimación Cardio Pulmonar (RCP) afuera del boliche Le Brique y a las 6 de la mañana del 18 de enero decretaron su muerte en el hospital de Villa Gesell.
"Presenta traumatismo cerrado de abdomen con laceración hepática y hematomas en intestino grueso producto de múltiples traumatismos cerrados. Además, presenta hemotórax izquierdo con infiltrado en ambas parénquimas pulmonares", agrega el reporte. El traumatismo cerrado es una herida interna, que no es sangrante al exterior, como las lesiones en el hígado.
El hemotórax, en tanto, es la presencia de sangre en la cavidad pleural, entre la pared torácica y el pulmón. Generalmente esto ocurre a raíz de un traumatismo. Al respecto, se visualizó que los dos pulmones se encontraban "con abundante infiltrado hemático".
La causa oficial de muerte fue un "paro cardíaco traumático", mientras que el mecanismo de muerte fue un "shock neurogénico por traumatismo grave de cráneo".
Lo que falta saber
La autopsia se realizó el mismo día del incidente -el 18 de enero- por un médico de la Policía Científica. Sin embargo Clarín habló con el reconocido médico forense Mariano Narciso Castex, quien no dudó en tildar al informe inicial de "pobre, rutinario y omite profundizar en la causa de muerte".
El experto señaló que la autopsia omite pericias clave que no se realizaron y lamentó que no se siguiera el protocolo del extinto Osvaldo Raffo. "Primero, lo que se hace con un traumatizado que viene golpeado es verificar las marcas en la ropa. Segundo, una vez que se saca la ropa se examina el cadáver, sin lavar, para hacer coincidir las marcas de los golpes".
"El informe señala que se ha lesionado severamente el tronco cráneo encefálico y que la muerte es por un shock neurogénico. ¿Lo comprobaron bien con radiografías o solo con la inspección ocular?" Si es neurogénico, la muerte es instantánea", dijo Castex a Clarín.
El criminalista Raúl Torre añadió: "Las muertes son naturales o violentas. Dentro de las violentas hay tres variedades: homicida, suicida o accidental. Una muerte traumática es una muerte violenta. Aunque parezca una obviedad, el médico tiene que certificar todo esto, y en este terrible caso de Villa Gesell está claro que fue una muerte traumática, no natural". También agregó: "Los traumatismos de cráneo, dentro del cerebro, en las meninges, provocaron una cantidad de hemorragias que dieron lugar a una afectación que hizo que la vida fuera incompatible".
"Las patadas en el cuello le torcieron la cabeza a la víctima de manera violenta" advirtió el forense y dijo que "falta estudiar a fondo las lesiones en la cara".
"Esto habla de un ensañamiento brutal, le han destrozado la cabeza", completó.
Todos estos detalles coinciden con las agresiones que vieron los testigos y amigos de Fernando Báez Sosa, ya que ellos señalaron que el joven cayó al piso y allí los rugbiers empezaron a pegarle patadas en la cabeza y el cuerpo.