La DGE retira de las escuelas libros polémicos que envió la Nación

El gobierno escolar provincial consideró que el contenido es “inadecuado” y “grotesco”. Habían llegado a escuelas de nivel secundario.

La DGE retira de las escuelas libros polémicos que envió la Nación
La DGE retira de las escuelas libros polémicos que envió la Nación

Finalmente, la Dirección General de Escuelas (DGE) decidió retirar los libros enviados desde la Nación que en

los últimos días levantaron polémica en la provincia (y en el país) por su contenido sexual explícito y de violencia

.

Se trata de cinco historietas y un libro que serán sometidos al análisis de un equipo de especialistas de la DGE. Así, el "Inspector Justo y otras historias", de Sanju; "Sin novedades en el frente", de Patricia Breccia; "Rompecabezas", de Pablo De Santis; "Polenta con pajaritos", de El Tomi; y "Slot Barr", de Ricardo Barreiro, serán sacados de circulación en las escuelas hasta nuevo aviso al igual que el popular libro de Diego Capusotto, "Peter Capusotto".

Estos textos tenían como destino 440 secundarias orientadas, escuelas técnicas y CENS de Mendoza, aunque sólo alcanzaron a llegar a 98 establecimientos que, tras la decisión del gobierno escolar, deberán archivarlos y no ofrecerlos a los alumnos.

"Nos parece que es un material inadecuado y por eso es que emitimos un mensaje a todos los directores para que no lo incorporaran a las bibliotecas hasta que tomemos la decisión de qué hacer con ellos", explicó Livia Sandez, subsecretaria de Planeamiento.

Sandez explicó que desde la DGE desconocían el contenido del material, ya que el procedimiento para nutrir a las bibliotecas de las secundarias mendocinas desde la Nación no involucraba una revisión previa, hecho que a partir de este incidente hizo cambiar la estrategia de distribución.

"No se revisó este material porque tiene un proceso de selección en la Nación que incluye licitaciones, logística en la distribución y que lleva en general más de un año y medio. Así, la logística está preparada para que desde el centro operativo de editoriales donde fueron seleccionados los textos se opere con Correo Argentino y llegue a las provincias en paquetes cerrados directamente a las instituciones educativas", detalló la funcionaria.

Agregó además que si los textos hubieran pasado por la Dirección de Escuelas -lo que sucederá a partir de ahora- se hubiera evitado este inconveniente. "Si hubiese pasado por nuestras manos hubiéramos dicho que eran inapropiados. Nosotros rescatamos el valor de la literatura y el acceso a libros en las escuelas secundarias. Desde el Ministerio han llegado 180 textos donde hay libros de (Julio) Cortázar, de Marco Denevi, de Abelardo Castillo, es decir, de autores muy importantes y muy ricos para la formación de nuestros alumnos".

Respecto a las historietas, Sandez estimó que aunque tienen un alto interés en los jóvenes, no es necesario el acceso de los chicos a imágenes "grotescas", donde no es claro el rol de la mujer y no hay respeto de género. "Creemos que se podría haber evitado esto teniendo una historia de la historieta argentina muy interesante, aún de estos mismos autores", aseguró.

Lectura inadecuada

Recordemos que la polémica se generó cuando Osvaldo Calvente, director de la escuela técnica Ingeniero Guillermo Villanueva de Maipú, calificó la historieta del "Inspector Justo" en los medios de comunicación como "subido de tono" y consideró que en el texto se "denigra" a la mujer.

Sandez interpretó que desde Buenos Aires no se hizo una lectura adecuada de la idiosincrasia de cada provincia, ya que no se midió correctamente el impacto que iban a tener este tipo de materiales. Por eso, a pesar de que desde la Nación se estableció que los libros e historietas polémicas no son de carácter obligatorio, en Mendoza no serán difundidos por las bibliotecas escolares.

"No es una medida que va en contra de la Nación sino que es una medida que tiene que ver con resguardar las formas de abordaje de la enseñanza que se da en Mendoza y que está destinada a potenciar el acceso al resto del material", consideró la funcionaria, que no se privó de cuestionar al directivo escolar maipucino que destapó la polémica:

"Queremos confiar en el sistema educativo destacando el rol responsable de nuestros directores y bibliotecarios, excepto el que salió por los medios. A las instituciones que llegaron, adultos responsables analizaron el material y decidieron la separación directamente".

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