La recolección de residuos es un tema clave en las gestiones municipales, por el impacto de ese servicio en el prestigio de la administración y muy especialmente la del intendente, quien pone en juego los votos de los vecinos. Pero además es un negocio para las empresas que lo gestionan, con ganancias de $ 85 millones sólo en el Gran Mendoza.
La forma de administrar ese tema clave tiene dos alternativas: hacerlo con los empleados y camiones municipales o tercerizar el servicio, tal como lo hacen seis de los 18 municipios. La empresa más ganadora, con presencia en cinco departamentos (Guaymallén, Capital, Godoy Cruz, Luján y San Martín), es Bodegas y Viñedos Santa Elena SRL.
Esa es la razón social de la sociedad anónima. El nombre que aparece en el sitio web de la empresa es Grupo Santa Elena, que tiene tres áreas de trabajo: construcción, higiene urbana y viñedos en el Valle de Uco, de los que toma la razón social de la empresa.
Santa Elena presta servicios en la las municipalidades de Tres de Febrero, Villa Gesell, Pinamar en provincia de Buenos Aires y Rio Grande en Tierra del Fuego.
La segunda empresa es Lime, que hace la recolección en Las Heras y además tiene el relleno sanitario de El Borbollón, dónde va a parar la basura de todo el Gran Mendoza.
Lime es parte del grupo Tysa, que también presta servicios de higiene urbana en Rosario y en Ciudad de Buenos Aires. Este grupo está vinculado a la familia Pescarmona.
Red Coen SA y Ecur SA son dos empresas mendocinas que intervienen como unión transitoria de empresas (UTE) en Luján. Ecur se dedica a obras civiles, barrido de calles, contenedores. Red Coen está inscripta como constructora de obras civiles y redes de agua, eléctricas y telecomunicaciones y limpieza de edificios.
En general, funcionarios y vecinos valoran el servicio de los privados en esas comunas; desde la administración sostienen que tienen más agilidad a la hora de comprar camiones o repuestos, así como también del personal, su ropa y ART. En este punto, hay una razón política oculta: la recolección de residuos es sensible y determinante en las elecciones, por lo que puede ser usado como elemento de presión de parte de los sindicatos municipales, que no influyen en las empresas privadas.
La concesión privada es eminentemente urbana. En Guaymallén, Santa Elena presta el servicio en San José, desde Mitre hasta la Costanera y desde Pedro Molina hasta Acceso Este; desde ésta última arteria hacia el sur, hasta el límite con Godoy Cruz también está al empresa, pero el límite este es Azcuénaga y el oeste sigue siendo la Costanera. En ese polígono entran los barrios Unimev, Alimentación y Dorrego.
En las dos zonas Santa Elena hace la recolección y también barrido y la limpieza de las acequias y cobra 11 millones de pesos por mes. En el resto de la geografía guaymallína, es la Comuna la que presta los servicios.
En Godoy Cruz, el territorio del departamento se divide en tres franjas: una al oeste del Corredor; la central que llega hasta el eje Cervantes-Remedios de Escalada y la tercer franja al este de ese eje vial. La lonja geográfica del centro es la que sirve Santa Elena. Las otras dos franjas, dónde se ubican las barriadas más populares del departamento, las cubre el municipio con personal y camiones propios.
La Municipalidad de Godoy Cruz le paga a Santa Elena 14 millones y sus prestaciones incluyen desrame y poda de árbolado y recolección especial a los comercios, que se hace en horario diurno.
En Luján de Cuyo se divide la superficie departamental en tres anillos. El central (dónde se ubica la ciudad de Luján) el servicio se lo reparten Santa Elena y la UTE Red Coen-Ecur. El segundo anillo, alrededor de la ciudad (menos densamente poblado), el 50% está concesionado a las empresas y el resto lo sirve la Comuna; el tercer anillo, lo más alejado, incluyendo los distritos de montaña, los sirve la municipalidad.
“La recolección es más barata en las zonas urbanas. En zonas rurales la prestación es muy cara; Agrelo tiene 78 habitantes por kilómetro cuadrado y la ciudad 1.500 habitantes por kilómetro cuadrado. De alguna manera la comuna ‘subsidia’ el servicio en esas áreas y dónde es más barato, lo tercerizamos”, dijo el jefe de gabinete Esteban Allasino.
En total, Luján paga 11,2 millones de pesos por mes a las dos empresas sólo por la recolección. El reparto del dinero entre ambas es casi 50% a cada una: Santa Elena cobra 5,7 millones y la UTE Red Coen-Ecur 5,5 millones.
En Capital, Santa Elena hace el servicio en todo el departamento. Arrancó en 2014 con una franja al este del departamento, desde el límite con Las Heras, hasta el límite con Godoy Cruz, desde Costanera hasta Belgrano, sin incluir el Centro y el Barrio Cívico.
En 2016 Santa Elena llegó al Centro, Alameda (de Rioja a 9 de Julio y de Godoy Cruz-Córdoba a Ayacucho) y todos los barrios del oeste capitalino, desde Boulogne Sur Mer, excepto el Parque General San Martín que es jurisdicción provincial.
En 2018, cuando se traspasó el barrio Cívico a la jurisdicción de la Capital, se renegoció el contrato con Santa Elena para que sirviera esa parte y, de paso, también obtuvo el servicio en la Quinta y Sexta sección.
Así es que la empresa tiene prácticamente todo el departamento y cobra por el primer contrato 13,5 millones y por el segundo 21 millones. En total 34,5 millones por el barrido, la recolección de residuos (incluidos los cestos callejeros) y la de ramas y escombros y la de puntos verdes y contenedores, así como también riego en espacios verdes.
En Las Heras el servicio también lo hace un privado incluyendo las villas de montaña. La empresa es Lime y cobra $14 millones por mes. En la zona urbanizada y en Uspallata, la recolección es tradicional, con recolectores y camiones. En alta montaña hay contenedores que se buscan una vez por semana.
La deuda de San Martín con Santa Elena
San Martín es el departamento dónde arrancó la historia de Santa Elena en la recolección de residuos. Están trabajando allí desde 1999. Actualmente hace la recolección de residuos en las dos zonas más densamente pobladas del municipio: Ciudad de Santa Martín y Palmira; el resto lo cubre la comuna con personal y camiones.
Santa Elena cobra allí 22 millones de pesos. El contrato con la empresa ha sido objeto de cruces públicos entre el PJ y la UCR.
El crítico de ese contrato ha sido el concejal Sergio Dubé (UCR), quien resalta que el documento legal fue firmado durante la gestión de Jorge Giménez, “que además le dejó a Raúl Rufeil (actual intendente) una deuda de $ 80 millones que estamos pagando en 12 cuotas fijas sin interés”. Es decir que mensualmente San Martín le paga a Santa Elena 30 millones de pesos en concepto de servicio y de cancelación de deuda.
