En los próximos días, la comuna de San Martín rescindirá el contrato que desde hace un año tiene con la Asociación Trabajadores de la Seguridad (ATSE), entidad que en 2014 ganó la licitación para administrar el estacionamiento medido, que hay en 40 cuadras de la ciudad y por el que se paga $3 la media hora.
La decisión del municipio obedece a una serie de "irregularidades" detectadas en la prestación del servicio, una medida que se vio acelerada en las últimas horas, luego de una protesta de empleados de ATSE que reclamó el pago de sueldos atrasados y el cese del trabajo en negro.
"Hace tiempo le señalamos a la concesionaria que debía corregir una serie de irregularidades, pero eso nunca pasó y los plazos de espera se han vencido", explicó el secretario de Gobierno, Oscar González y completó: "Ante este escenario, vamos a apelar a un plan B y a rescindir el contrato".
Entre las irregularidades a las que se refiere el funcionario municipal, figura el hecho de que hace más de 60 días que ATSE no paga el canon de $120.000 que mensualmente debe abonar al municipio, por administrar el servicio, una cláusula que figura en el pliego de licitación: "Vamos a rescindir el contrato, pero eso no significa que se acabe el estacionamiento medido, solo vamos a cambiar de sistema", aclaró González, quien no descartó que se exija el pago del canon adeudado por vías legales.
A comienzos de 2014 y apenas ganada la licitación, ATSE puso a la empresa Estacionamientos Argentinos como gerenciadora, una firma que casi desde el inicio mostró problemas con las condiciones laborales del personal y el atraso en los sueldos; pero además, hubo graves irregularidades con los usuarios, ya que se detectaron decenas de casos en los que se cobraba estacionamiento fuera de los horarios o calles autorizados e incluso, en los días feriados.
El asunto terminó con la desvinculación de la gerenciadora, la toma de control del servicio por parte de ATSE y la promesa de corregir problemas, pagar el canon municipal y sueldos atrasados.
Sin embargo y según confirmó la comuna, la situación no mejoró y sigue el conflicto, al punto que ayer, un grupo de empleados dejó su lugar de trabajo y recorrió las calles para reclamar por las condiciones laborales y los sueldos atrasados.
"Los dos primeros meses pagaron jubilación y desde entonces estamos en negro", dijo Jorge Arce y siguió: "Acá pagan el sueldo por partes y no nos entregan equipamiento ni vestimenta; fijate a la altura que estamos y no hemos cobrado diciembre ni tampoco el aguinaldo. Queremos que paguen y que pongan a la gente en blanco".
Celeste Magallanes también es tarjetera: "Me pagan el sueldo en tres veces, hace un año que estoy así y yo tengo una nena a la que alimentar; yo les cumplo y vengo todos los días, pido que también me cumplan"; cerca de allí otro muchacho comentaba: "Se aprovechan de la necesidad, prometieron $ 5.000 de sueldo pero nos entregan $ 4.000 en partes y a veces ni siquiera eso".
Reunidos en la explanada de la comuna, los tarjeteros aseguraron que a la empresa le entra suficiente dinero para hacer frente a los gastos: "Por día recaudamos entre todos unos $ 23.000 y en ocasiones la cifra llega a los 40.000".
"Vamos a pasar a un sistema sin intermediarios, donde los tarjeteros autorizados van a comprar sus tarjetas en la comuna y a llenarlas con los vehículos; la diferencia con lo que pague el conductor será para ellos", explicó González
