Una beba recién nacida fue rescatada por una mujer en medio de una fuerte tormenta que azotó a Port Elizabeth, en Sudáfrica. Había sido arrojada 48 horas antes dentro de una alcantarilla repleta de hormigas rojas.
La semana pasada, Charmaine Keevy, de 63 años, paseaba como cualquier otro día junto a su perro salchicha Georgie. Sin embargo, los intensos ladridos del animal la desconcertaron, ya que apuntaban hacia una alcantarilla de cemento en la que el perro detectó una presencia.
La mujer escuchó un quejido y creyó que se trataba de un gato pero, al acercarse, encontró a una beba recién nacida llorando y salió a buscar socorro ante semejante hallazgo. En la ruta, la anciana alertó a conductores para que se acercaran a ayudarla a sacar a la niña y la situación la preocupó aún más: el lugar estaba colmado de hormigas rojas, potencialmente mortales para la beba.
"Al alzarla supe que necesitaba urgente atención médica", manifestó Charmaine al Daily Mail. "Simplemente no sé por qué alguien podría hacerle esto a una bebé recién nacida, pero estaba tan contenta de que pudiéramos ayudarla y salvarle la vida", dijo.
La pequeña fue llevada de urgencia al hospital Dora Nginza de Sudáfrica, donde fue atendida y estabilizada, ya que estuvo dos días en la alcantarilla. Pesa 3,09 kilogramos y, afortunadamente, está fuera de peligro.
"Honestamente, creo que estaba destinada a encontrar a esa bebé por Dios, ya que generalmente tomo una ruta diferente en mi caminata con mi perro, pero por alguna razón fui por otro camino", expresó la mujer que halló a la beba.
Por su parte, la vocera de la Policía, Priscilla Naidu, aseguró que la única manera en que la beba haya llegado hasta la alcantarilla debe haber sido por medio de la acción de un adulto que sacó la tapa de cemento que recubre el drenaje y la colocó allí.
"Hay una posibilidad de que la persona que abandonó a la beba sea de otro lugar y depositara a la pequeña allí”, detalló.
La beba, que fue bautizada como Grace April, quedó bajo el cuidado de la Unidad de Protección de la Niñez, Crímenes Sexuales y Violencia Familiar de la Policía de Sudáfrica. Por estas horas, las autoridades están tratando de dar con el paradero de su madre.
El vocero de Salud de Port Elizabeth, Sizwe Kupelo, dijo que el abandono de Grace April es el cuarto en pocos días. Uno de los bebés abandonados tenía síndrome de Down.