El titular del Instituto Provincial de Juegos y Casinos, Carlos Bianchinelli, anunció ayer que uno de los funcionarios del organismo denunciado por trabajadores del Instituto, Ricardo Rodríguez Figueroa, ha renunciado y que la renuncia fue aceptada en la mañana de hoy. "Se la pedí hace varios días y la tengo desde el 29 de abril en mi escritorio", dice Bianchinelli.
De esta forma, el ex diputado maipucino salió a despegarse de cualquier vinculación con Rodríguez: "Sólo lo he visto un par de veces y lo nombramos en la gerencia de Fiscalización porque ya había estado antes en esa área".
Del mismo modo, Bianchinelli fustigó a los dirigentes de ATE que representan a trabajadores del Instituto. Asumió que los casinos departamentales no abrieron "porque se adhirieron al paro los tesoreros y sin esos funcionarios, no se pueden hacer los arqueos", pero que la mayoría de la gente fue a trabajar. También dijo que más del 80% del personal de Casino central estuvo en sus puestos de trabajo.
Entre las explicaciones de Bianchinelli se cuenta el motivo que adujeron los hombres de ATE para ir al paro: la modificación del organigrama del Instituto que fue modificado por dos resoluciones de hace casi 15 días, lo que implicaría una violación a lo acordado en paritaras en diciembre.
Esgrimiendo el acta de esa reunión paritaria Bianchinelli remarca: "Acá dice que la estructura de las gerencias es atribución del directorio. Lo que vamos a discutir del organigrama en la paritaria que se abrió ahora es el escalafón del Instituto y de ahí haremos el organigrama que ellos quieren discutir, pero las gerencias las definimos en el directorio".
Por último queda por explicar la situación de Rodríguez y del otro denunciado, el ex asesor legal de la repartición Italo Pappalardo. Al respecto, Bianchinelli dijo que ambos son empleados de planta del Instituto, por lo que no puede hacer nada a no ser que la investigación administrativa o judicial, en caso de que la hubiera, para que diga que han hecho algo que amerite un sumario administrativo. Lo que sí aseguró el presidente del Instituto es que Rodríguez ya no es gerente de Fiscalización.
La sorda pelea
Hasta acá las explicaciones acerca de lo publicado en la edición de ayer de Los Andes. Es cierto lo que dice Bianchinelli acerca de la renuncia de Rodríguez. Fue presentada la semana pasada. Lo que no dijo el titular del Instituto es que esa renuncia era parte de la negociación con ATE para detener la medida de fuerza.
Desde hace varios meses la cabeza de Rodríguez era uno de los objetivos de los hombres de ese gremio que revistan en el Casino. Tal como lo pretenden mostrar en la denuncia que hizo pública Los Andes ayer, acusan a Rodríguez y Pappalardo de abrir la puerta a la renegociación del contrato de concesión de las tragamonedas que ha beneficiado a la concesionaria, Mendoza Central Entretenimientos, del grupo Vila-Manzano.
Con esa renegociación, la empresa pasó de cobrar el 26% al 47% de la recaudación de las máquinas. En rigor, el paso es gradual y actualmente el porcentaje que cobra es del 40,09%. El 47% está bajo análisis de Fiscalía de Estado.
El dictamen de Fiscalía es lo que espera Bianchinelli para otorgar el canon que firmó otro titular del Instituto, Daniel Pereyra.
Este incremento del canon choca de lleno con la lucha salarial, puesto que una parte del sueldo de los trabajadores del Instituto proviene de la recaudación del Casino y la mayor parte de esa recaudación viene de las tragamonedas.
En los mentideros que observan los movimientos del Casino se dice que el paro del fin de semana fue apresurado. Sobre todo, si la renuncia de Rodríguez estaba sobre la mesa de negociación.
Lo que está claro es que Bianchinelli pretende moverse haciendo equilibrio entre los intereses en pugna dentro del Instituto. "Yo voy a hacer lo que sea legal, sin importarme quién sea el protagonista"jura el ex diputado. Hacer equilibrio sin quedar salpicado, es su consigna.
