El papa Francisco ha aceptado la renuncia presentada por el arzobispo australiano Philip Wilson, implicado en un escándalo de abusos sexuales, informó hoy el Vaticano.
Wilson, obispo de la ciudad de Adelaida, es el clérigo católico de mayor rango en el mundo que ha sido condenado por el encubrimiento de abusos sexuales en el seno de la Iglesia. A principios de julio fue sentenciado a 12 meses de prisión por haber encubierto acusaciones de abuso dirigidas contra otro religioso. Inicialmente, el prelado, de 67 años, se había negado a dimitir.
El arzobispo fue declarado culpable de haber encubierto el abuso a dos monaguillos por parte de un sacerdote en la década de los 70. Wilson interpuso recurso de apelación contra la sentencia.
El propio primer ministro de Australia, Malcolm Turnbull, había intervenido en el caso pidiendo al papa que despidiera a Wilson.
"Saludo la dimisión hoy de Philip Wilson como arzobispo de Adelaida, que reconoce tardíamente los muchos llamamientos, incluido el mío, para que renunciara", afirmó Turnbull en un comunicado.