Datos del Observatorio Vitivinícola Argentino muestran que los rendimientos promedio en 2013, una cosecha muy buena en términos de volumen, no alcanza la cifra requerida.
Así para la variedad criolla grande el promedio fue de 198 quintales por hectárea; la cereza logró 162 quintales por hectárea; la moscatel rosada 112 quintales; chenin, 141 quintales y Pedro Giménez, 136 quintales.